¿Y si hubieran continuado la guerra, sin soltar al hijo del Chapo?

Jorge Marcelino Trejo Ortiz
Maestro Jorge Marcelino Trejo Ortiz, presidente del Colegio de Abogados del Estado de Guanajuato

¿Qué pudo haber pasado si las fuerzas federales hubieran continuado el enfrentamiento a los grupos del crimen organizado en Culiacán el pasado día 17, sin liberar al hijo del Chapo Guzmán? Solo estaríamos hablando hoy, no de decenas sino quizá de cientos de muertos, pero en especial de muchas víctimas inocentes de la población civil.

En ese supuesto, hoy la crítica no sería que le faltaron… agallas al Presidente, o que no hubo una estrategia fundada en la inteligencia por parte del Gobierno Federal, sino del gobierno culpable de una masacre indecible.

Entre la vorágine de información mediática, opiniones, memes, videos, chats, debates, discusiones en todos los niveles sociales en las redes, incluso en el orden internacional, me llamó la atención una reflexión: la de una mujer (Carolina Hernández) que cuestiona los señalamientos hacia el Presidente López Obrador, pero pone el dedo en la llaga: “es fácil hacer señalamientos desde otros lados cuando las víctimas no las pone tu familia sino la población inocente de Culiacán”.

Independientemente de dudar de la tendencia o autenticidad de esa persona en comento (como es natural), no podemos menos que aceptar esa verdad inconstrastable: ¿quién iba a poner los muertos? ¿los que estábamos en otras ciudades criticando porque el Ejército no usaba toda su fuerza para aplastar a los grupos del narco? Y lo pudo haber hecho: emplear tanques para quitar bloqueos, avionetas para bombardear o ametrallar a sus contrincantes, mandar milicia y grupos antiguerrillas y agregar a la Marina, que no estaba presente, pero… ¿y el resultado?

Al día siguiente de los hechos en Culiacán, surgió una información de que no solo el cártel de Sinaloa estaba actuando y atacando a las fuerzas federales, sino células y grupos de otros cárteles que se unieron con un mismo fin: atacar al gobierno y liberar a Ovidio Guzmán. Lo que es posible porque se pretendía extraditar al junior del Chapo.

Ese fenómeno de unión de grupos rivales ya había pasado en Colombia para anular la captura de Los Extraditables, que fue una organización criminal creada por los capos de la droga colombianos considerada como un apéndice del Cártel de Medellín.

No ha terminado el debate de lo ocurrido y dará para mucho más tiempo. Por lo pronto, Andrés Manuel López Obrador ha aceptado que fue un fracaso la pretendida captura y que faltó inteligencia en una acción “que no me fue informada”, pero que él estuvo de acuerdo en soltar a Ovidio para preservar la seguridad y la vida de personas inocentes.

Dice AMLO que lo van a atrapar después y lo va a hacer porque lo va a hacer y de seguro también al hermano Iván Archibaldo, pero el narco es un monstruo de mil cabezas y muchos tentáculos que se regenera. Si cortas una cabeza, surge otra y la bestia no muere.

El cártel de Sinaloa hubiera seguido con Ovidio o sin Ovidio. Se requiere inteligencia, estrategia, táctica y determinación para acabar con el monstruo, o por lo menos para debilitarlo.