Retos de la Comunicación Política en México para el 2020

Benjamín Segundo Ramírez
Benjamín Segundo Ramírez, columnista Platino

León Guanajuato a 7 de Enero.- En la actualidad la percepción que tienen los ciudadanos de los políticos se encuentran entre las siguientes palabras: adversidad, injusticia, traiciones, doble moral y corrupción; no distinguimos ninguna situación positiva o acción que ayude o resalte la labor de todos aquellos que hacen política en México.

“La comunicación no es lo que uno dice, sino lo que el otro entiende y hace tras lo que ha entendido”. – Xavier Domínguez

Dentro del año 2020 la comunicación política estratégica será fundamental para que los políticos que verdaderamente quieran cambiar la percepción que la población tiene de ellos; la comunicación  tiene que emocionar sino es sólo información.

El primer gran reto que tienen los políticos es el de diferenciar la comunicación de gobierno y la comunicación electoral; por su parte la comunicación de gobierno busca el consenso y el beneficio de la ciudadanía, mientras que la electoral busca obtener el voto o disuadir en favor de algún partido o político.

La escucha es el segundo reto que se tiene, ya que para la gran mayoría se cree que comunicar es solamente decir, cuando el proceso de la comunicación requiere de feedback, retroalimentación; es por ello que la escucha activa es fundamental para lograr una comunicación eficiente.

La tecnología y el ambiente digital son herramientas que nos permiten desarrollar mejor la comunicación, entendiendo que son herramientas y no el todo. Al respecto el big data y la capacidad de procesar datos que nos ayuden a conocer a nuestros públicos para la toma de decisiones y elaboración de mensajes para poder llegar a cada uno de los públicos según sus intereses. De igual modo el clustering de los diversos públicos nos ayudara a entablar una comunicación eficiente con los diversos públicos. Entender que el ambiente digital son más allá que las redes sociales y que la comunicación es más que estar en éstas será el tercer reto.

Dentro del ambiente digital el principal reto será el tener la capacidad de generar estrategias para no ser invasivos y de respetar los datos personales. También las redes sociales seguirán siendo importantes pero no lo son todo y se requerirá de mucha creatividad para estar e interactuar en ellas.

La creatividad, la identidad y la acción en conjunto permitirán a los políticos establecer mejores diálogos y permitir que sus mensajes lleguen y emocionen, el romper los moldes acartonados, demostrando que son humanos y ciudadanos como cualquier otro permitirá la conexión; este es un gran reto ya que los políticos actuales viven en una burbuja la cual debe romperse.

Otro reto será el de romper de tajo con la generación y distribución de fake news o noticias falsas, lo cual ha impactado más en el descrédito del quehacer político que en el beneficio momentáneo de un ligero “triunfo” mediático, que termina ensuciando también tu reputación.

En conjunto con la creatividad la generación de contenido visual o auditivo serán un gran reto; un 33 % de la población ve diariamente más de 30 minutos de vídeos online y la tasa de crecimiento anual del branded podcast del 30% hasta 2022. Por lo que los videos permitirán que los mensajes logren entenderse mejor y el desarrollo de podcasts con contenidos  realmente interesantes para la ciudadania serán de utilidad.

El último gran reto será el de entender y hacer funcionar el binomio de comunicación y marketing, ya que alineados se podrá llegar al éxito planteado, teniendo claro que van juntos pero no revueltos. Pero sobre todo que la comunicación y el marketing se llevan a cabo por profesionales que generan acciones estratégicas y no situaciones de improvisación.

Estas situaciones nos dejan claro el panorama que tienen los políticos para echar mano de la comunicación estratégica política y tener una comunicación verdadera y eficaz.

Benjamín Segundo Ramírez
Comunicador por formación. Consultor en Comunicación Estratégica. CEO de ESKAUT Consultores. Máster en comunicación y marketing político por el CESCOMPOL, asesor en imagen política por el Colegio de Imagen Pública, relacionista público por el Centro Unesco y varias instituciones más.