La Dalia, una exquisita flor mexicana y comestible

Dalia, una flor mexicana que es curativa, comestible y hermosa...

NOTIMEX.- Más allá de ser la flor nacional, declarada como tal en 1963, la dalia es por mucho una flor con gran potencial para alimentación, salud y ornato por sus propiedades nutracéuticas, y su belleza capturada en al menos 36 especies endémicas.

Al igual que muchos tesoros naturales prehispánicos, esta flor guarda una gran variedad de virtudes que la han llevado a ser actualmente estudiada por investigadores de diversas instituciones, ya que resulta incluso ideal para hacer galletas o crear remedios para la piel o como expectorante para la tos.

Así lo comparte Julieta Ruiz, bióloga y productora de dalias que tuvo la osadía de dejar su trabajo para incursionar en la cosecha de esta flor y que en un principio sólo visualizó para su explotación en el mercado de la alimentación.

De la mesa a la botica, una flor con muchos remedios

A partir de la experiencia de la dalia, hoy Julieta maneja una gran variedad de productos derivados de esta flor y que no sólo se limitan a la comida gourmet, sino que también tiene aplicaciones cosméticas y para la salud misma, como lo hay descubierto investigadores de la Universidad Autónoma de Chapingo.

Recordó que al comenzar a extender su campo de acción, tuvo la oportunidad de conocer a Rafael Mier, representante de Fundación Tortilla, quien la ayudó a contactar con chefs gourmet que a su vez comenzaron a experimentar con ella toda las variedades de platillos que se pueden producir a partir de la dalia.

Por ejemplo, hoy yo entrego los pétalos de dalia a los diferentes restaurantes gourmet, quienes los aprovechan en fresco para hacer salsas, mermeladas, nieves, quesadillas, tisanas y deshidratados para otra serie de variedades de alimentos.

Además, dijo, resulta que la misma variedad de dalias que existe ofrece sabores diferentes, por lo que una dalia de pétalos blancos tiene un sabor ácido, mientras que de las amarillas hasta las rojas adquieren un sabor cada vez más dulce.

Asimismo, la raíz o tubérculo se vende en fresco para ser consumido a manera de jícama o rábano en rebanadas, proporcionando una gran porción de fibra, carbohidratos aminoácidos e inulina, además de que se le ha encontrado una propiedad que inhibe la reproducción de la bacteria E.Coli.

Fue esta propiedad la que hizo que investigadores de la Universidad de Chapingo se enfocaran a investigar las 36 especies endémicas que existen de manera silvestre en el país y las hibridas o compuestas que son las que se cultivan en parcelas.

El resultado, dijo, fue una gran variedad de propiedades de manera que hay dalias con mayor cantidad de inulina, mientras que otras han resultado incluso demasiado eficientes para problemas respiratorios, al fungir como expectorante, así como regulador de insulina y triglicéridos, lo que resulta prometedor para quienes padecen diabetes o hipertensión.

A su vez, el tubérculo seco sirve en rodajas para hacer té, el cual ha resultado eficiente para ayudar a la gente a regular sus triglicéridos, mientras que molido en harina funciona para preparar galletas y pasteles, guardando gran parte de sus propiedades alimenticias y curativas.

Reveló que para obtener un kilo de harina de dalia, es necesario siete kilos de tubérculo en fresco, mientras que de pétalos frescos se obtienen 17 gramos deshidratados a partir de un kilo de pétalos frescos.

Con el paso del tiempo Julieta ha descubierto nuevas aplicaciones y sabores a partir de la dalia, por lo que hoy incluso ofrece Sal de Mar con dalia roja deshidratada, lo que da como resultado una sal que brinda un sabor muy diferente además de proporcionar beneficios digestivos.

Los pigmentos de los pétalos sirven para teñir, por lo que pueden ser utilizados en lugar de la pintura vegetal en repostería, a la vez que se brinda un sabor diferente y con las propiedades que brinda la dalia para salud y alimentación.