León Guanajuato a 22 de febrero de 2021.-Son 9 (nueve) las hectáreas de armonía, entre la naturaleza y la obra humana, las que tiene el Fórum Cultural Guanajuato (FCG). Dicho número está relacionado con el cuerpo, el intelecto y el espíritu, además de simbolizar el triunfo y la victoria. En el caso que nos ocupa para dar paso a tan notable centro cultural, en mayo de 2004 se iniciaron los trabajos de demolición de las segundas instalaciones del Instituto Lux (1951) otrora Escuela Granja que también sirvió para las “Exposiciones Agrícolas y Ganaderas” en las Fiestas de Enero de la ciudad pues las primeras instalaciones del colegio (1941) estuvieron en la calle 5 de Mayo frente al templo de las Tres Aves Marías o de la Santísima Trinidad como también le conocen.
El terreno, que colindaba junto a la granja “La Martinica”, pertenecía por cierto al Gobierno del Estado de Guanajuato. Fue solicitado al gobernador Enrique Fernández Martínez por los integrantes del Círculo Leonés Mutualista (CLM) a través de su presidente Alfonso Durán Miranda para que facilitara las instalaciones y permaneciera el Instituto en la ciudad.
Entonces, en 2004 el Colegio de Arquitectos intervino en la realización del proyecto de las plazas y áreas exteriores del conjunto. La ejecución la llevó a cabo el despacho Aura Arquitectos mismo que remozó la finca de la esquina de las calles Francisco I. Madero y Juan Valle para dar paso a la Biblioteca “Antonio Torres Gómez” (1997) ahora extinta.
Ahora bien, desde 2005 se conoció el complejo como Centro Cultural Poliforum, concebido, por Decreto Gubernativo No. 247 del 25 de noviembre, como un organismo público descentralizado de la Administración estatal, con personalidad jurídica y patrimonio propios. Y es hasta febrero de 2007 cuando el Gobernador del Estado Juan Manuel Oliva Ramírez, emitió el Decreto Gubernativo No. 15 donde se “reestructura la organización interna del Centro Cultural Guanajuato y cambia su denominación a Fórum Cultural Guanajuato” agregando a la descentralización “la autonomía orgánica, técnica y presupuestal necesaria para el cumplimiento de su objetivo”.
Por ende, los 7 (siete) recintos del FCG son:
- Biblioteca Central Estatal “Wigberto Jiménez Moreno”.
- Museo de Arte e Historia de Guanajuato.
- Jardín de las Esculturas.
- Sala de Conciertos “Mateo Herrera”.
- Calzada de las Artes.
- Departamento de Estudios Culturales de la Universidad de Guanajuato.
- Teatro del Bicentenario “Roberto Plasencia Saldaña”.
En cuanto a las directrices de operación que rigen al FCG son 8 (ocho). A saber:
- Formación de públicos e impulso a la difusión de las artes plásticas y escénicas.
- Impulso a la docencia e investigación sobre arte regional.
- Fomento a la lectura y acceso al conocimiento.
- Promoción en la investigación del patrimonio histórico y artístico.
- Fomento a la educación y desarrollo integral del individuo.
- Ampliación y acceso a bienes y servicios.
- Desarrollo y consolidación de la infraestructura.
- Vinculación con el entorno fomentando la participación social.
De aquí se desprende entonces la formación de públicos de la región, así como de la localidad para impactar al Centro-Occidente del país a una población de 32 millones de personas aprox. cómo fue concebido de manera inicial el proyecto y como continuidad a la frecuencia de instituciones culturales fundadas por ciudadanos probos tanto en la otrora villa como ahora en la ciudad de León.
Lo mismo opera para llevar a cabo la transversalidad de los contenidos para que conozcan, sensibilicen, aprendan y se propicie un virtuoso intercambio cultural con todos los agentes culturales: familias, empresas o compañías, Estado; artistas, las compañías productoras, el Estado y el consumidor o público espectador.
A lo anterior se le conoce como política pública desde la óptica de la Nueva Gestión Pública (NGP) opuesta al modelo de Administración Pública Progresiva (APP) que detenta la nueva administración del FCG. Aquí es donde, si se deja la superficialidad cultural, la sociedad se beneficia de la llamada canasta básica de cultura o en otros términos cumplimenta el ejercicio de la Ley de Derechos Culturales para el Estado de Guanajuato (2018) armonizada a la Ley General de Cultura y Derechos Culturales (2017).
Por el momento histórico que vivimos ante la pandemia de SARS-Cov-2 que provoca la enfermedad del Covid-19 los bienes culturales que produce, gestionan y difunde el FCG están supeditados a una nueva estrategia de trabajo que atañe a todos: artistas, maestros y promotores, así como consumidores —todos agentes culturales— que nos veremos beneficiados si sabemos organizarnos.
Esto es, si seguimos las recomendaciones del dossier La cultura en crisis. Guía de políticas para un sector creativo resiliente (UNESCO, 2020) donde nos piden atender la “necesidad de mejorar los mecanismos de protección social, económica y laboral de los artistas y profesionales de la cultura”, ya que es “preciso mantener, fortalecer y consolidar sus condiciones de vida y trabajo”.
Lo mismo cabría si atendemos, porque nos sentimos más neoliberales que nunca, La pandemia pone a prueba la economía creativa. Ideas y recomendaciones de una red de expertos (BID, 2020) donde el Banco Interamericano de Desarrollo nos propone la “búsqueda de modelos de negocio alternativos, que serán vitales para apoyar la recuperación del sector”.
Finalmente, echar mano del Informe del Registro Nacional de Espacios, Prácticas y Agentes culturales. Mayo 2019-Agosto 2020 (SC, 2020) también conocido como “Informe Telar. Espacios, prácticas y agentes culturales”, donde si se toma como “herramienta que se construye desde la diversidad de prácticas y expresiones artísticas culturales para la toma de decisiones e implementación de políticas públicas territoriales que garanticen el ejercicio integral de los derechos culturales de las personas, grupos, poblaciones y comunidades”, saldremos mejor librados del embate que nos aqueja en Guanajuato, ya que dicho Informe da cuenta la precariedad en que estamos y vivimos los agentes culturales del rumbo.
Así pues, ahora que está constituido el equipo completo del FCG y apelando a la “justicia social, para este gobierno, es que todos tengan las mismas oportunidades para su desarrollo” (Gobernador Diego Sinhué Rodríguez Vallejo dixit) debería de convocar al sector de agentes para gestar el mejor impulso cultural para favorecer el intercambio de ideas, la mejor generación de la identidad regional junto con la promoción de valores que favorezcan el desarrollo cultural que todos buscamos.
¿Será mucho pedir que la autoridad correspondiente abra una ventana de diálogo para planear mejor la nueva gestión pública del Fórum Cultural Guanajuato? O se quedarán solo con la jocosidad del intercambio de la guacayama por la cajeta.
*Este es un resumen ejecutivo. El documento completo está a disposición de la autoridad mayor del FCG, es decir, su Consejo Directivo en turno, para su consulta.
