AGENCIAS.- No hay duda alguna sobre la popularidad de Facebook como red social. En ella publicamos todo tipo de textos y fotografías, con miles y millones de usuarios que cada día están en esta comunidad.
Especialistas en la materia han llegado a concluir que cada cosa posteada en Facebook dice mucho de tu manera de ser y de tu grado de inteligencia, pues estos expertos aseguran que la esencia de estas publicaciones es, en realidad, un reflejo de tu personalidad y tus gustos.
Atendiendo a esta teoría se podría decir que cada contenido publicado puede descubrir fácilmente lo que temes, lo que te acompleja, lo que te causa trauma y pánico, lo que alimenta tu propio ser, además de tus principios y formación. Es por eso que deberías pensar muy bien lo que quieres colgar en esta red, para no enseñar nada que no desees.
Hasta podría decirse que muchas de tus fotografías o textos compartidos prácticamente claman a todo pulmón que eres una persona con poca autoestima. Evalúa las posibilidades:
- Revelar dónde te encuentras
¿Cuál es el objetivo de hacer esto? Seguramente pretendas mostrar a tus seguidores y amigos lo que eres capaz de hacer en base a tu estatus económico y social: los grandes momentos que estás viviendo en algún lugar determinado a donde hayas podido viajar, cuál es tu medio de transporte o ese concierto, en el que has conseguido una excelente ubicación para ver al artista.
¿Has respondido afirmativamente a alguna de estas situaciones? ¡Pues tu opción la próxima vez debería ser aprovechar el momento! Son muchos los instantes que perdemos buscando el mejor encuadre para hacer una foto con el móvil. Y si hablamos en términos de seguridad, es preferible no indicar tu situación.
- Compartir tus ejercicios matutinos
Documentar cada uno de tus movimientos en el gimnasio seguramente no te llevará a alcanzar la forma deseada más rápido.
Ya resulta bastante fuera de lo común no ver publicaciones sobre entrenamientos. Si no subes la foto diaria en el gym, ¿acaso quiere decir que no fuiste?
- Subir lo que comes
A ver, saquemos cuentas. Realmente, ni siquiera tu humor del día es relevante para los usuarios de las redes sociales, ¿por qué habría de serlo ese plato de frutas que desayunaste? ¡Seguro que te recompensaría más disfrutar del momento!
Eso es mucho más sano que revisar constantemente el timeline y el progreso, o no, de la cantidad de “me gusta” que recibe tu foto. Tengas muchos o pocos likes, de igual forma te comerás la comida.
- Mostrar tus compras (en un tono nada humilde)
¡No hay duda! ¡Tienes baja autoestima! Gritarle al mundo lo que tienes o puedes comprar, ¿te hace más especial? ¿Te da mayor importancia? En cambio, hay algo que sí sabemos que se distinguirá enseguida: ¡lo insoportable que eres!
Después de todo, ir de compras es una actividad que todos hacemos en algún momento. Hazte un favor, amigo adicto de Facebook, recuerda que el nuevo iPhone que adquiriste no es para subir fotos de él, sino desde él. ¡Gracias!
- Luciendo coche
Subir fotos de tu automóvil, contigo al volante, presumiendo de marca. ¿Te suena?
- ¡Selfies en cantidad!
Un estudio de la Universidad de Arkansas reveló que las personas que cuelgan constantemente fotos en sus redes lo hacen debido a su inseguridad.Postear los momentos captados les resulta un requisito imprescindible para ser reconocidos por otras personas.
Por eso las publicaciones más frecuentes en sus redes son los autorretratos o selfies, en posiciones ciertamente favorecedoras. Pero si a esta acción habitual le sumas el empleo de programas de edición para mejorar tus imágenes antes de postearlas, serás, sin duda, el próximo en ser eliminado por tus contactos.