Si la federación no reorienta su presupuesto en salud, Guanajuato tendrá riesgo en 2020

El Secretario de Salud de Guanajuato, Daniel Alberto Díaz en el centro. Le acompañan el doctor Carlos HIdalgo y el doctor José Ángel Cordova

León, Gto., 12 de julio.- Guanajuato podría enfrentar serios problemas en salud si la federación no reconsidera la inversión pública en este rubro, de hecho, en la actualidad comienzan ya a afectarse el programa de vacunación, prevención de adicciones, alertas de suicidio y atención en zonas vulnerables.

El secretario de Salud de Guanajuato, Daniel Alberto Díaz Martínez, reconoce que hasta el momento Guanajuato ha logrado contener algunas contingencias con el recurso propio, pero es un dinero que se terminará y no alcanzará más “vislumbramos un riesgo en el 2020 o 2021” reconoció.

Si bien el gobierno federal aduce a la curva de aprendizaje y a una condición de reorientación del gasto social, donde se incluyen los servicios de salud, los apuros económicos que padece Guanajuato en este rubro, se deben a que prácticamente la atención a la salud se convirtió en una inversión estatal.

Tres partes del presupuesto en salud han salido de la bolsa estatal y, aunque recientemente se firmó un convenio para que el Gobierno de México envíe 190 millones de pesos más para abastecer la demanda, hasta el momento no hay reglas claras de cómo y dónde llegarán. Es más, no se tiene fecha para la recepción del dinero.

“La transición ya se prolongó pues no tienen seis o siete meses revisando lo que se requiere en materia de salud. Desde la segunda semana al terminar la elección (y al saberse que serían gobierno en el país) comenzaron a hacer las revisiones” a la Secretaría de Salud, revela Díaz Martínez.

Frente a ello, confía que pronto se vuelva a retomar el rumbo para que camine el sector salud pues, hoy día, las pruebas de tamiz neonatal, medicación para personas que viven con VIH, la primera y segunda campaña de vacunación, médicos del programa extinto Prospera, medicamento, becas y gastos de operación “los ha cubierto el estado”.

Daniel Díaz Martínez, quien salió de ser el director del Hospital General de Silao a la Secretaría de Salud al llegar la crisis por dengue a su antecesor Ignacio Ortiz Aldana, incluso reveló que falta el suministro de vacunas para la campaña que iniciará en octubre próximo y que no han llegado el suministro de antígenos. Dos campañas pasadas, fueron cubiertas con recurso estatal.

“De cada 100 pesos una tercera parte es estatal y cubrimos huecos y espacios” como la compra de medicamentos, pero en otros casos, el impacto en programas se ha reducido “ha habido recortes en el programa de salid mental y lo que tiene que ver con el riesgo de suicidio y prevención de las adicciones”, revela.

“EN SALUD, CON MENOS SE HACE MENOS”

Uno de los argumentos del gobierno federal es que se han realizado recortes para conseguir ahorros, pero el Secretario de Salud de Guanajuato advierte que solo hay un resultado en una ecuación que no se puede modificar: “en salud con menos se hace menos y con más se hace más. Lo que no se refleja en presupuesto, tendrá repercusiones”.

Y es que en Guanajuato donde, presume el funcionario, hay un manejo “responsable del recurso”, existe una medición desde hace más de 30 años que permite conocer con evidencia las mejores prácticas.

Ello ha permitido, refirió, seguir en un programa llamado Caminando a la Excelencia, pero es un programa que se financia con el Fondo de Aportaciones a la Salud (FASA) que, ahora, ha tenido importantes recortes que afecta “a programas de salud mental, prevención de riesgo de suicidios, prevención de adicciones” entre otros.

No obstante y aunque se dan visos que puede mejorar, como la firma de un convenio para enviar a Guanajuato 190 millones de pesos para gastos de salud que, sin embargo, no se ve cómo puedan llegar, el Secretario de Salud confía que la curva de aprendizaje se allane por el bien de la población.

“Vislumbramos un riesgo en el 2020-2021. El recurso estatal no va a alcanzar. No vamos a especular pero, este 2019 los guanajuatenses deben tener la certeza que en nuestros hospitales tendrán atención. En el sistema estatal hasta el momento seguiremos trabajando, no sabemos qué pasará en el 2020. Por lo pronto, nuestro respeto a la federación, pero creemos que no debe haber afectación a la salud por una cuestión administrativa”, concluyó.