Se normaliza el delito

Psic. Juan José Alvarado
Psic. Juan José Alvarado

¿Tú estarías dispuesto a cometer algún delito? Esa fue la pregunta de un ejercicio que realizó hace ya algunos años la PROFECO. Preguntamos directamente a muchos estudiantes de secundaria y de preparatoria.

Fue un proyecto que se denominó: “Mi patria no es corrupta” y la verdad, pocos estaban dispuestos a cometer algún delito, a corromperse o a corromper.

Este ejercicio lo he seguido haciendo y a la vuelta de casi 30 años, los resultados han cambiado, desgraciadamente, a favor de la corrupción.

Cada día más ciudadanos están dispuestos a delinquir, a corromperse (no solo a corromper) y hablamos de personas GCU Gente Como Uno. Quizá como tu que ahora estas leyendo estas líneas.

No hablo de esas personas de torva mirada, de mal aspecto, de turbios pensamientos, no, hablo de personas con las que convivimos a diario, que nos las encontramos en la calle, en el transporte, en el trabajo, en la escuela, en la iglesia, en fin, personas normales que ahora son parte de la norma: ser corrupto.

Cada día se justifican más los actos delictivos, los actos de corrupción y se denosta a aquellos que no roban, que no engañan, que no corrompen, que no se corrompen, que no delinquen. Se critica a los que “no aprovechan” las circunstancias para tener beneficios ilegales.

Los márgenes de edades se han ampliado, ahora hablamos de gente que va de lo muy joven a lo muy viejo, de hombres y de mujeres, de ricos y de pobres (también de clase media) con estudios de primaria al doctorado.

Hay quienes están dispuestos a delinquir por unos cuantos pesos y otros que, sin ambages, dicen, “si me llegan al precio sí le entro”. Vamos, para ser claros… sobran delincuentes, lo que falta es presupuesto.

Claro que la mayoría critica en público a los delincuentes, a los corruptos, pero en la intimidad de las tertulias con amistades, en las charlas de sobremesa familiar, manifiestan estar dispuestos: “si me llegan al precio sí le entro”. ¡Qué cinismo!

Como diría un clásico: “hay que cuidar la cartera que estamos entre amigos”