EL ARRANQUE
Es momento de hacer un sencillo corte de caja y delinear, a grandes rasgos, el arranque de la competencia electoral hacia la elección presidencial de 2024. Extraoficialmente, las candidatas de las principales alianzas están definidas y ahora enfocan sus baterías para conformar sus equipos, repartir candidaturas e implementar estrategias.
Legalmente, hay que subrayarlo, realizarán sus labores como coordinadores de sus respectivos grupos políticos; aunque en los hechos veamos las acciones como acciones de campaña.
Bien, demos un rápido recorrido por las alianzas, los candidatos y aspectos importantes que influirán en la competencia electoral con el fin de ubicarnos en un punto de partida y considerar posteriormente la evolución o los cambios que se vayan registrando en el proceso.
EN EL OFICIALISMO
En el caso de la 4T, ha sido designada como coordinadora Claudia Sheinbaum Pardo. La mayor parte de los aspirantes reconocieron el resultado y han manifestado su respaldo a la ex Jefa de la Ciudad de México. El mismo presidente Andrés Manuel le entregó el bastón de mando como símbolo que ahora se convertía en la líder del movimiento. Sucesivamente, gobernadores, legisladores, políticos han expresado su adhesión a Sheinbaum.
Ya ha ido conformando su equipo de colaboradores entre los que se encuentran Adán Augusto, Ricardo Monreal y Fernández Noroña. También ha perfilado algunas posiciones clave de la competencia electoral como Omar García Harfuch como candidato a la Ciudad de México.
Todas las encuestas la ponen al frente, junto con su coalición de partidos (Morena, PT y PVEM) con una ventaja considerable. Algunas de ellas con amplia ventaja como: Covarrubias (32 puntos) o GANA (35.3 puntos). La mayor parte entre 19 y 10 puntos porcentuales y otras, menos ventaja como: GEA/ISA (3 puntos) o México Elige (5.8 puntos).
El único pendiente que queda al interior del movimiento de la 4T es el papel que jugará Marcelo Ebrard. Por otra parte, veremos si Claudia Sheinbaum mantiene la ventaja hasta el día de la elección y si eso le sirve para conseguir la mayoría en el Congreso.
LA REBELIÓN DE EBRARD
Inmediatamente después de dar a conocer los resultados del proceso en el oficialismo, el único que no los reconoció fue Marcelo Ebrard por considerar que se habían dado una alta cantidad de incidencias.
Vinieron las especulaciones, sobre todo de una posible ruptura que podría tener consecuencias en el proceso electoral federal. Algunos analistas hablaron de una división del voto en la izquierda, otros incluso, de que dividiría el voto de la derecha.
El lunes 11 de septiembre expuso su posición en donde señaló que interpondría al interior de Morena una queja sobre las irregularidades y esperaría una respuesta, comenzaría una gira en octubre por todo el país y evaluaría su permanencia en Morena.
Con lo anterior, el factor Ebrard se diluyó por completo en el proceso federal porque no rompe con el presidente ni con la 4T. Tal vez gane tiempo, afine su estrategia, pero todo parece indicar que ha dejado pasar su momento.
EN LA OPOSICIÓN
En el Frente Amplio por México (FAM) después de un proceso azaroso, Xóchitl Gálvez terminó con la candidatura. En parte, por la popularidad que le representó los ataques del presidente. Logró conjuntar a los partidos del frente que parecían no converger en varios puntos.
Ha nombrado a Santiago Creel como su coordinador de campaña y se muestra abierta a distintos perfiles políticos para que se integren como colaboradores. Todavía no han existido muchos nombramientos al respecto y representa uno de sus retos: elegir políticos que puedan ser aceptados por la sociedad y conciliar intereses políticos de los partidos.
Xóchitl Gálvez parte en una clara segunda posición. La discusión se centra en si está en competencia o no. De encontrarse en competencia el reto es ganar la elección; de lo contrario, sería reducir la distancia, ganar espacios en el congreso y gubernaturas, en otras palabras, evitar que Morena se convierta en una fuerza predominante.
LA IRRUPCIÓN DE VERÁSTEGUI
También hay que considerar la inscripción como candidato independiente de Eduardo Verástegui ante el Instituto Nacional Electoral. Es el fundador de la asociación Viva México que cuestiona a toda la clase política en nuestro país. Bajo el lema: Dios, Patria y Familia busca incorporar a los ciudadanos que consideran que no están representados por los actuales partidos políticos.
Es considerado un proyecto político de derecha al mostrar simpatía con políticos como Donald Trump, Boris Johnson, Jair Bolsonaro o Santiago Abascal. También al cuestionar las políticas que no apoyan a la familia.
Todavía le queda mucho camino por recorrer para formalizar su candidatura, pero lo podría conseguir y convertirse en el fenómeno de 2024. Seguramente podrá reunir adeptos, pero difícilmente se convertirá en contendiente.
MOVIMIENTO CIUDADANO
Movimiento Ciudadano es una de las incógnitas para el 2024 por varias razones: su estrategia, su candidato y la unidad del partido. Todavía pasarán meses para onocer el rumbo que tomará en cada uno de estos aspectos.
Lo cierto es que el partido está fracturado, por un lado, está su líder nacional, Dante Delgado, y por el otro, Enrique Alfaro que en Jalisco sigue fuerte.
Es un hecho que Movimiento Ciudadano no va a ganar la elección, pero sí podría dividir el voto y afectar la elección en estados importantes como Nuevo León y Jalisco.
VARIABLES A CONSIDERAR
Entre toda esta amalgama de competencia electoral hay algunas variables importantes a considerar:
– El interés de la ciudadanía. Será un factor muy importante porque eso podría determinar el nivel de participación.
– Las redes sociales. Como en el 2018, las redes sociales tendrán un lugar protagónico para posicionarse, difundir publicidad, contrarrestar propaganda, etc.
– Campañas negras. Crearíamos que todo es propuestas y debate; sin embargo, son un factor determinante las campañas negras porque permiten el contraste y el ataque al criticar las ideas y propuestas de los oponentes, su carácter e imagen. Serán el pan de cada día durante muchos meses y veremos cuáles tienen mayor efecto.
Este es el arranque de la competencia electoral y debemos seguir tomando el pulso.
