Guanajuato, Gto., 4 de septiembre de 2025.- Que se retiren “marañas” de cables aéreos que afectan la imagen urbana de esta ciudad, Patrimonio de la Humanidad desde 1988 y que, además, representan un peligro para habitantes y visitantes, propuso la diputada Ruth Tiscareño.
Se refirió a espacios públicos del Centro Histórico donde el cableado es excesivamente peligroso y contaminante visualmente, como las calles de Galarza, Sangre de Cristo, Paseo de la Presa, y callejones como San Cayetano, la Escondida y Terremoto, así como en lugares abiertos como la Plazuela de los Ángeles y el Jardín Embajadoras.
Apuntó que, en materia de turismo, la imagen urbana se convierte en un activo estratégico, pero también precisó que la presencia caótica de infraestructura pasiva aérea, elementos no arquitectónicos que alteran visualmente la estética del entorno, no se circunscribe al casco antiguo, también a la periferia.
Tiscareño Agoitia dijo que postes y cables aéreos, de telecomunicaciones y para transmisión de energía eléctrica vienen a ocasionar que en todas partes haya una “maraña” de cables sin que se sepa a ciencia cierta si siguen prestando un servicio o ya son inutilizables, lo que permite percibir un desorden arquitectónico.
Además, ante vientos y lluvias, los que transportan electricidad comienzan a chispear y a generar cortos circuitos que ponen en peligro el paso de las personas debajo de ellos, añadió y recordó que en marzo de 2023 se registraron incendios en el Centro Histórico a causa del cablerío.
Afirmó que durante el gobierno municipal 2012-2015, presidido por el priista Luis Gutiérrez Márquez, en el Centro Histórico se construyeron ductos soterrados para la conducción de cables, pero que pareciera que autoridades que siguieron han sido rebasadas, porque la capital se encuentra abarrotada de cables hoy en día.
Para la congresista, la presencia exagerada de cables aéreos es una problemática alarmante que debe ser abordada con responsabilidad y urgencia, motivo por el cual propuso un Punto de Acuerdo para exhortar al Ayuntamiento de Guanajuato para que proceda en consecuencia.
Para que implemente un programa de acción y lleve a cabo convenios con prestadores de servicio que utilicen infraestructura pasiva aérea a fin de que sean retirados cables en desuso, a partir de determinarse zonas a intervenir y un calendario de trabajo que marque ritmo de avance en esa tarea.
“Reconocemos complejidad y costos relacionados al reordenamiento y soterramiento de los cables, y que ello sólo es posible a través de una coordinación entre autoridades, prestadores de servicios y usuarios”, dijo y remarcó que, sin embargo, “es momento de echar a andar una estrategia que contenga un esquema concertado con las partes, con fases o etapas progresivas”.
Al exponer su propuesta de Punto de Acuerdo en sesión de la Diputación Permanente, la diputada Ruth Tiscareño recordó que existe un Reglamento de Edificación y Mantenimiento para la Ciudad de Guanajuato y Municipio que establece lo que toda infraestructura debe instalarse en forma oculta, pero que no acontece así.







