Otoño

Adriana Oliva es una experta en psicología. Columnista en Platino News.

“Pertenezco al otoño.  Y en otoño me hablan todas las cosas que he perdido”. Elizabeth Bowen

El otoño es una de las temporadas que anuncia el inicio de una serie de festividades llenas de color, alegría, fiesta y celebración, el frío comienza a estar presente y suele tener ese olor de calidez, amistad y familiaridad.

Es la temporada donde familiares y amigos que se encuentran lejos, comienzan a preparar sus viajes, para el invierno, puedan reunirse con sus seres queridos.

Los índices de depresión y suicidio suelen bajar en estas épocas por el acompañamiento familiar que nos cobija, pero paradójicamente también existen lugares en donde el índice aumenta justo, por la familiaridad que conlleva estas fechas.

Lamentablemente, para algunas personas, su hogar y familia no siempre han sido un lugar seguro, y el inicio de esta temporada anuncia la llegada y convivencia con su agresor, con personas que las lastimo y que por muchas razones no pudieron defenderse ni hacer justicia.

Esta temporada es el recuerdo de acontecimientos dolorosos, de extrañar a sus seres queridos, de recordar épocas donde estaban bien, y hoy es diferente, personas que la convivencia les hace, recordar a la familia con la que no cuentan, eventos donde asisten con pareja y no siempre se cuenta con ella y en ocasiones ha sido por momentos dolorosos, y aunque parezca absurdo por estar en pleno siglo XXI, sigue habiendo personas, que en estas épocas, preguntan por eventos dolorosos en lugar de preguntarte ¿Cómo estás?

Para ti, que hoy estás leyendo esta columna, que tienes un recuerdo triste de esta época, un evento que se tornara doloroso, quiero que sepas que no estás solo, que no tienes por qué estar conviviendo con las personas que te lastimo, que no va a ser fácil, pero, puedes iniciar otras costumbres, elegir nueva convivencia, que puedas recuperar la emotividad de esta época, que puedes y debes elegir tu propia festividad desde tu paz, desde el amor que te mereces.

Así que deseo que te aferres a tus sueños, que la esperanza de algo mejor te haga vencer tus miedos, que, aunque todo parezca estar en tu contra, continúes y hagas lo correcto, porque nadie merece estar conviviendo con personas que no son honestas y que el respeto no es su valor.