Guanajuato, Gto., 19 de agosto.- La secretaría de Salud de Guanajuato informó que este año, a través de la dirección general de Protección contra Riesgos Sanitarios, ha solicitado la destrucción de 1.6 toneladas de carne contaminada con clembuterol.
El secretario de salud, Daniel Díaz dijo que el programa de verificación y vigilancia que ha derivado en la detección de la carne contaminada, se realizará en forma permanente a establecimientos productores de carne y puntos de venta en los 46 municipios, para que ésta llegue a tu mesa con calidad y libre de dicha sustancia.
La competencia en la producción de carne, el incremento en la demanda al menor costo y en el menor tiempo posible, es lo que ha presionado y orientado al uso ilegal de agentes moduladores del crecimiento en la producción ganadera.
La inocuidad alimentaria en el proceso de producción y comercialización de productos pecuarios es un tema relevante, ya que el uso de sustancias como el clenbuterol representa un riesgo para la salud pública; consumir carne contaminada produce signos de tremor muscular, náuseas, incoordinación, incremento de la frecuencia cardiaca y aumento de la presión arterial.
Durante el 2019 la Secretaría de Salud ha realizado 60 visitas de verificación para constatar las condiciones físico-sanitarias de rastros y/o mataderos municipales y particulares; 134 muestras tomadas para la determinación de clenbuterol; derivando en la destrucción de 1 mil 625 Kilogramos de carne contaminada.
Ante este panorama la Secretaría de Salud hace un llamado a la población a realizar la compra en establecimientos formalmente establecidos.
– Observar si el equipo, mobiliario, utensilios utilizados en el manejo de carne estén limpios.
– Identificar si la persona que expende el producto realiza el manejo de la carne de manera higiénica.
– Revisar que la carne se encuentre en condiciones adecuadas de refrigeración de 4-7 ° C.
En producto pre-envasado revisar que cuenten con fecha de caducidad o de consumo preferente, en el etiquetado que la información se encuentre clara, completa y sin tachaduras y, que el empaque no presente indicios de maltrato o ruptura.
En productos pre-envasado que requiera congelación, observar que se encuentre a una temperatura de 0 a -18°.
Mantener en condiciones adecuadas de almacenamiento la carne para evitar el crecimiento de microorganismos.