AGENCIAS.- El fabricante de autos japonés Toyota reiteró este miércoles que reducirá su inversión y producción en una de sus plantas en México que estaba en la mira del presidente estadounidense Donald Trump, que visitará el archipiélago en unos días, pero la empresa aseguró que la política no motivó su decisión.
Toyota reduce las inversiones en la planta de Guanajuato a 700 millones de dólares, frente a los 1,000 millones anunciados en 2015, para fijar una capacidad de producción de 100,000 unidades por año.
El plan inicial era construir 200,000 autos del modelo Corolla al año, pero el vicepresidente ejecutivo de la automotriz, Didier Leroy, dijo a reporteros en un aparte del Tokyo Motor Show que la producción de este vehículo irá a una planta que tiene prevista con Mazda Motor Corp. en Estados Unidos. El lugar en el que se ubicará la factoría y su apertura todavía no se han decidido.
Los planes de Toyota en esta nueva planta fueron muy criticados enero por Trump, cuando era presidente electo, que urgió a las firmas extranjeras a producir en Estados Unidos si apuntaban a operar en ese mercado.
Trump amenazó a Toyota con aumentar los aranceles si continuaba adelante con el plan.
Toyota explicó que la reducción de las inversiones está relacionado a un cambio en la producción en esta planta que debe comenzar a producir en 2019.
“Nuestro compromiso en México sigue intacto”, dijo a la AFP el portavoz de Toyota, Jean-Yves Jault. “Queremos al mismo tiempo que las operaciones en Estados Unidos crezcan y sean exitosas”, dijo.
La decisión “no es una respuesta directa a los comentarios de Trump. Va más allá de una sola planta”, añadió Jault.
Toyota planeaba en un primer momento construir en la planta mexicana 200,000 unidades del Corolla. Pero el grupo decidió ahora producir las camionetas Tacoma, fabricadas en dos plantas en América del Norte que tienen mucha demanda en Estados Unidos, en lugar del Corolla.
Esto reduce el monto de las inversiones previstas en la planta de México y el constructor decidió construir los Corolla en Estados Unidos, señaló Jault.
Para ello decidió junto con su nuevo socio Mazda invertir 1,600 millones de dólares en una nueva planta en Estados Unidos para fabricar hacia el 2021 los Corolla y los modelos de su socio.
Las automotrices japonesas están nerviosas por posibles represalias políticas en Estados Unidos tras haberse visto discriminadas en la década de 1980 por las exportaciones de Japón que se pensaba estaban sacando el trabajo a los estadounidenses.