No tienen llenadera

Juan José Alvarado, columnista en Platino News

Un producto decía en su publicidad: no es para quienes no pueden, sino para los que quieren más. Y vaya que daba resultado, más entre los jóvenes, quizá en duda con sus capacidades que se tomaban una aspirina por si acaso les dolería la cabeza.

Pero no se ha aplicado no solamente al terreno de lo sexual. Recuerdo cuando mis alumnos de prepa o de universidad me preguntaban: ¿Cuál es la mejor pastilla el viagra o la cialis? Veinteañeros preocupados por la erección. Les decía, si ahora lo necesitas, qué vas a hacer cuando tengas sesenta o más.

Claro que no me hacían caso. Acostumbrados y acostumbradas a no tener llenadera, a no satisfacerse con nada, a comer hasta hartarse, a beber hasta embriagarse, no sólo para disfrutar, para compartir, para departir, sino para perderse, para tener pretextos para hacer lo que sea o que les hagan lo que sea.

Buscan lo extremo y con esto incluyo esos deportes que tratan de demostrar a todos lo poderosos que son y solamente dejan ver lo vacíos que están, pues en la mayoría de los casos abandonan a sus parejas, a sus familias para ir al entrenamiento extremo, a la competencia extrema. Evacuando sus intestinos en plena competencia para no “perder tiempo”, para demostrar que son los mejores.

Se ha exaltado la competencia. Es ganar a cualquier precio, llegar a ser el mejor, el más destacado. A ser un súper héroe, un súper hombre. Ganar por ganar, para demostrar que se está más alto, más rápido, más fuerte.

Se quiere tener un pecho lleno de medallas, aunque la vida esté vacía. Y cada día vemos más y más infartados, fracturados, molidos hasta los huesos por hacer esfuerzo a los que no esta diseñado el cuerpo, pero eso no es lo más importante, hacer esfuerzo para los que no está diseñada la psique.

El Sujeto completo, realizado, maduro, no necesita demostrar nada a nadie. No requiere del reconocimiento banal, del aplauso de los demás, de la sonrisa aprobatoria. Se puede satisfacer con lo necesario, no hartarse de triunfos falsos, metas infantiles.

El no tener llenadera, va haciendo una sociedad insaciable, con una búsqueda inalcanzable e incansable de más y más. Tener por tener, buscar por buscar, haciendo y produciendo Sujetos profundamente insatisfechos, infelices, vacíos.

Como siempre, cada quien toma su propia decisión, pero es mejor estar bien que estar mal.