No son iguales, ¡Son los mismos!

Katya Morales Prado
Katya Morales Prado

Cuando dicen que el Gobierno actual es igual a los anteriores se está cometiendo un error de precisión, porque ¡No son iguales, son los mismos!

El espectáculo de las inauguraciones de obras inacabadas es de los pasajes más repetidos en la historia de nuestro país, es una actividad política electorera, muy recurrida desde hace demasiados años. Los ingredientes repetidos una y otra vez son: una obra que no está terminada a la que le faltan muchas cosas esenciales y todas las ornamentales, muchos acarreados, así que se vea mucho pueblo y que demuestren una gran felicidad en masa por la inauguración de la obra, la música, la fiesta popular, donde nadie se fija en  detalles como son que no hay agua, y todos pudieron llegar  “muy a tiempo y sincronizados” gracias a los camiones de acarreo,  un séquito de políticos que están ahí pasando lista y haciendo puntos para que el presidente los vea con buenos ojos y tengan posibilidad de ascender en su carrera,  son los mismos, solo han cambiado de partido, chapulinear es una de las características principales de la política mexicana, pero basta con darle una revisada a la trayectoria de cualquiera y los encontraremos  años atrás en otro partido al lado del presidente de otro partido, inaugurando una obra igual de inconclusa que esta.

Y los mismos empresarios de siempre, consentidos del régimen desde los tiempos de Salinas, diciendo lo que tengan que decir con tal de seguir siendo beneficiados con contratos, concesiones, préstamos y hasta exenciones de impuestos. La mafia del poder la llamaban, ahora son sus orquestadores, amigos, beneficiarios y benefactores.

Esta historia de la inauguración del Aeropuerto de Santa Lucía no es igual a las inauguraciones de escuelas, hospitales, carreteras y demás obras que han hecho los presidentes de México desde siempre, es simplemente la misma historia, el mismo guion,  los mismos actores, los mismos políticos, los mismos empresarios y hasta el mismo pueblo como personaje de relleno ambiental.

Me gustaría que las obras que se entregan de verdad sirvieran de algo, que estuvieran al menos terminadas, que no se tratara de simulaciones, me gustaría que los políticos fueran fieles a sus convicciones y no estuvieran haciendo maromas para buscar colocarse, me gustaría que los empresarios le exigieran al gobierno que gobernara de manera administrada y prudente y no callaran por contubernio todas irregularidades tan evidentes, que el pueblo fuera de verdad importante, que se buscara como mejorar su nivel de vida realmente y no se le usara como escenario decorativo para simular gran beneplácito a cambio de la torta y el refresco.

Pero sobre todo me gustaría que la ciudadanía en general se apartara un poco de los memes y las frivolidades distractoras como las tlayudas y se interesara más en  exigir una rendición de cuentas enfocada al gasto realizado en la obra, los contratos asignados, el cumplimiento de los mismos y la utilidad y desempeño real que el aeropuerto tendrá ya en la cotidianeidad actualmente y a futuro.

¡Dejemos de estar distraídos y pongamos atención en lo importante, o seguiremos escuchando el mismo cuento, repetido por los mismos cuentacuentos de siempre!

Mtra. Katya Morales Prado
Abogada egresada de la Universidad Iberoamericana León. Maestra en Derecho Corporativo, por la Universidad Latinoamericana. Maestra en Derecho Constitucional y Amparo, por la Universidad Iberoamericana León, con un Máster en Políticas Anticorrupción Iberoamericanas por la Universidad de Salamanca, España, cursando actualmente Doctorado en Derecho.