Tras 21 años de organizar el Festival Internacional de Cine en Guanajuato, verlo como a su hijo el más “latoso” y toparse con sexenios difíciles, funcionarios y políticos de todos los colores y sabores, Sara Hoch hoy puede presumir que se ha posicionado no sólo a nivel local, sino internacional y cada vez con más prestigio.
El XXI Guanajuato International Film Festival se llevará a cabo del 20 al 29 de julio de este año en las ciudades de San Miguel de Allende y Guanajuato capital y han participado directores como Tim Burton, Damián Alcázar y Danny Boyle.
Hoch habló de los inicios del festival, las buenas y las malas con las que se ha tenido que enfrentar y un tema importante en la actualidad, el cambio de generaciones, de ideas y expresiones a las que el festival se ha adaptado para llegar a donde está.
“Tengo una fama de muy latosa, y sí a lo mejor sí soy, yo creo que mi apodo es ‘pinche gringa’ en todos los sexenios de gobierno que he estado”, dijo la rubia que ya se considera mexicana.
Este fue el primer año en la historia que les llegaron más de 800 películas del festival durante la primera semana, pues normalmente reciben 50, lo que le ha dejado claro que siguen creciendo.
“Yo espero que el legado que dejó el cine siga creciendo aunque no estemos, yo creo que sí existe un parte aguas, antes y después de este Festival de Cine de Guanajuato, de Expresión en Corto, sin duda ya existe una cultura cinematográfica en este estado, en este país”, dijo.
La cineasta también habló de lo que hoy en día les preocupa y de las fallas que han tenido como generación, pues cree que le pudieron dar más a los jóvenes de hoy.
“Me preocupa el país, me preocupa el estado, me preocupa el futuro de estos jóvenes, mi generación falló, estamos entregando un país mal a estos millennials, tengo mucha fé en ellos, porque tenemos qué y yo quiero darles experiencias que enriquezcan su vida que sean embajadoras de sus historias, de su identidad, de su comunidad”, platicó.
Dijo que siempre hay oportunidad para cambiar situaciones económicas y políticas y ellos como cineastas lo único que quieren es dejar huella, formación, educación, espacios para hablar, para reflexionar y para crear diálogo.
El festival es de todos -comentó- es incluyente, todo mundo lo siente suyo, todo mundo tiene ideas y ese es el éxito, por eso se reinventan cada año.
“El éxito del festival es que hemos crecido con la industria cinematográfica, el país estaba complicado económicamente, hemos empezado con lo que tenemos, empezamos con cotrometrajes que era lo del alcance de la gente”, comentó.