Uno de los grandes errores de quienes participamos en elecciones es pensar que conforme avanzan los tiempos en el calendario también crece la importancia y complejidad de una elección, encontrado en las campañas su punto culmen y en el día “D” su importante desenlace.
Existen etapas que son igual o más importantes que el mismo día del sufragio, incluso algunas de ellas previas al inicio de la elección y las cuales merecen ser atendidas con sumo cuidado so pena de consentir decisiones que el día de mañana no aceptan modificación alguna y pueden ser definitorias para el rumbo de una elección.
La definición del árbitro de la contienda por ejemplo es a mi juicio una de las decisiones más importantes pues dota de garantía y certidumbre a un proceso que por naturaleza es esencialmente de confrontación, al final de cuentas es la disputa del poder público en la versión más civilizada de la guerra, ya no en un sometimiento basado en la conquista, si no a manera de respaldo y legitimación popular.
Un árbitro que actúa con equilibrio, imparcialidad, honestidad y profesionalismo garantiza la ecuanimidad tan necesaria en un proceso que además de breve resulta muchas veces improvisado y un tanto caótico por la naturaleza propia de la materia electoral.
En nuestro estado el Instituto Electoral del Estado de Guanajuato es la autoridad electoral en nuestra entidad y le corresponde la preparación, desarrollo y vigilancia de los procesos electorales de carácter estatal, siendo su máximo órgano de dirección el Consejo General que se integra por 7 Consejeros de los cuales uno funge como Presidente y son designados por el Consejo General del INE (que es la máxima autoridad electoral de manera centralizada en nuestro país) de manera escalonada por 7 años.
Es así que en septiembre próximo concluye con éxito el periodo de los consejeros Indira Rodríguez Ramírez, Luis Miguel Rionda Ramírez y Santiago López Acosta, por lo que el INE llevara a cabo el proceso de renovación para su sustitución; Soy testigo del profesionalismo, entrega, capacidad y objetividad con la que han desempeñado su labor y por ello será muy importante que quienes le sucedan en el encargo tengan los mismos atributos que garanticen la imparcialidad tan necesaria en sus funciones, el proceso de designación por el Consejo General del INE suele ser meticuloso y exhaustivo por lo que seguramente así será.
Ahora bien la autoridad electoral se extiende a Consejos Distritales (22) y Municipales (46) que se instalan de manera extraordinaria justo para el inicio del proceso electoral, selección que se desahogara mediante convocatoria para su integración por el IEEG en la primera quincena del mes de julio del año previo a la elección y bajo las mismas premisas de profesionalismo, imparcialidad y objetividad con las que se debe desempeñar toda autoridad electoral.
Los Consejos Electorales (Distritales y Municipales) se integran por 3 Consejeros Propietarios de los cuales uno de ellos se desempeñará como Presidente y 1 Supernumerario (a manera de suplente); 4 funcionarios en total por Consejo, lo que nos arroja un total de 272 funcionarios que prestarán sus servicios para la conducción del proceso electoral en el Municipio o Distrito que se hubiese aprobado por el Consejo General del IEEG.
Ahora bien el IEEG tiene 15 Juntas Ejecutivas Regionales (JER) para brindar cobertura, por medio de estas oficinas los servidores públicos que en ella se desempeñan logran promover la participación ciudadana y los distintos programas que tienen como objetivo impulsar la Democracia; La ley electoral mandata que los Titulares y Secretarios de estas oficinas que trabajan de manera ordinaria en sus respectivos municipios para el inicio del proceso electoral funjan como Presidente y Secretario de los Consejos Electorales (distrital o municipal) que le hubiese asignado el Consejo General del IEEG; Con lo anterior el ejercito de mediadores que se ocuparan para la conducción de la elección se conforma de 242 ciudadanos con experiencia electoral sin filiación partidaria y 30 funcionarios del IEEG.
El Instituto Electoral ha ido perfeccionando cada vez más la forma de procesar estas designaciones y ha ido de la mano con una mayor cultura de participación ciudadana al punto que ya existen perfiles que sin estar afiliados a un partido político han logrado una trayectoria electoral sólida.
Lejos deben de quedar aquellos tiempos en que perfiles improvisados se designaban desde el poder en el gobierno confiando más en la afinidad política que en las capacidades técnicas, ya no basta solo con el buen nombre del Empresario Zapatero o del reconocido Doctor a quien se le confía el arbitrio de la elección; No, hoy hace falta más que eso para vigilar una elección.
Sin embargo existe desde mi punto de vista una objeción y es que los Consejos Electorales deberían de atender a un criterio de proporcionalidad según su población, es decir, no me parece suficientemente representativo que un cuerpo colegiado de 4 personas designadas por el IEEG sean los que conduzcan la elección de municipios como León, Irapuato y Celaya; La trascendencia de este tipo de elecciones no puede recaer en solo 4 personas (2 de ellas funcionarios) y considero debería de abrazar una representatividad ciudadana más amplia que provea de un carácter incontrovertible a su actuar.
No es la misma responsabilidad la que tiene el Presidente del Consejo Electoral del Municipio de León (con más de medio millón de votos por desahogar) que la que pueda tener su homólogo de Xichu o de algún Consejo Distrital, sin embargo el órgano colegiado tiene los mismos 4 integrantes, lo anterior resulta en una limitación legal con la que tiene que trabajar nuestro sistema electoral y que admitiría su revisión por el Congreso del Estado.
El IEEG ha generado diplomados en línea que buscan contribuir a la formación de competencias electorales de aquellos ciudadanos que busquen colaborar como funcionarios electorales con miras a la elección del 2021, un acción novedosa y plausible en la construcción de nuestra democracia.
Con estas acciones se fortalece nuestro sistema electoral y atiende uno de los puntos más sensibles de toda elección, toca a los partidos políticos coadyuvar en la vigilancia y selección de los mejores perfiles que brinden certeza, seguridad y objetividad a todo el proceso electoral.
“Una elección resulta exitosa no en la toma de decisiones difíciles, si no en la previsión y preparación que antecede a la natural contención y litigio entre las partes”.
