¿López-Gatell ha mentido en las cifras oficiales de COVID-19?

Emmanuel Bañuelos
Emmanuel Bañuelos pluma Platino News

León Guanajuato a 11 de Mayo.-La semana pasada distintos medios internacionales, entre ellos el Wall Street Journal, El País y The New York Times, señalaron que las cifras de muertes en México a causa del COVID-19 podrían ser mayores a las reportadas oficialmente.

Para entender mejor este señalamiento y poder concluir su validez, tendríamos que dividirlo en dos partes.

La primer parte corresponde a la premisa básica de los reportajes: la cifras reales podrían ser mayores a las cifras oficiales. Lo cual es completamente cierto.

Y para poder llegar a esta conclusión no hay que ahondar más allá de las propias declaraciones del Dr. López-Gatell.

La primera vez que señaló esta posibilidad de manera tácita y clara fue a comienzos de la Fase 2, para ser más precisos, en la conferencia llevada a cabo el 8 de abril, donde explicó el funcionamiento del Modelo Centinela para la prevención y atención de enfermedades infecciosas.

En ese momento él explicaba que existen 375 unidades de salud que monitorean el comportamiento de una muestra representativa de las enfermedades respiratorias y arrojan una estadística de los casos sospechosos de COVID-19 contra los casos confirmados, y se concluyó que los casos oficiales a ese día deberían de multiplicarse a una tasa aproximada de 8 para tener un número estimado de casos reales.

Por poner un ejemplo práctico, si hiciéramos esa multiplicación a los casos confirmados al día 10 de mayo, que redondeando números estarían en 35,000, la cifra de casos reales estimados sería al rededor de 280,000.

Y continuando con el mismo orden del proceso, a esa cifra tendríamos que aplicarle la tasa promedio de defunciones, la cual en México se encuentra en 10%.

Es decir que tendríamos aproximadamente 28,000 muertes directamente relacionadas con COVID-19, contra 3,465 confirmadas oficialmente.

Sin embargo ese modelo matemático ya no está vigente a partir de la entrada en vigor de la fase 3 debido a múltiples factores, entre los que se pueden destacar el comportamiento de la misma pandemia y su incremento exponencial de contagio, la integración de nuevas fuentes de información de casos confirmados, como laboratorios privados, reportes de hospitales, etc., lo cual provoca que el tasa de multiplicación tenga que actualizarse, cifra que al día de hoy no existe confirmación oficial por parte de la Secretaría de Salud.

Especialistas hablan de una estimación que podría rondar entre 12 y 30 veces que se tendrían que multiplicar los casos oficiales.

La segunda parte del señalamiento de los reportajes, se refiere a que el Gobierno Federal, a través del Sub Secretario de Salud, Hugo López-Gatell, ha mentido deliberadamente ocultando cifras.

Situación que a pesar de ser posible, no necesariamente es cierto, ya que, como lo comentamos anteriormente, el Sub Secretario ha aceptado que existen casos que no se han contabilizado de manera oficial, pero que sí se reconoce su existencia.

Incluso, en relación directa con estos reportajes, López-Gatell señaló que existen casos que se tendrán que confirmar por un comité de dictaminación y que en su momento se añadirán a la estadística.

Lo que es interesante evaluar es la razón por la que se cuestionaría la credibilidad de la Secretaría de Salud y en específico la del Dr. Lopez-Gatell.

Aunque es claro que el Sub Secretario cuenta con las credenciales suficientes para cubrir las necesidades de su puesto, es cierto también que ha cometido errores de comunicación al administrar la crisis, que han puesto en entre dicho la confianza en sus acciones.

Es más, su credibilidad ha sido saboteada por el mismo Presidente. Basta recordar el inicio de la crisis sanitaria en el país, cuando el presidente anunciaba que la situación se resolvería para el 18 de abril, y volteaba hacia López-Gatell esperando su confirmación, mientras que el Sub Secretario respondía tímidamente “más o menos”

Sin mencionar todas las veces que con sus acciones el Presidente ha contravenido las indicaciones de López-Gatell de no abrazarse, no besarse y quedarse en casa.

El mismo Sub Secretario, aparentemente para quedar bien con el jefe, declaró que el Presidente no es una fuerza de contagio, que es un fuerza moral, cuando se le cuestionó sobre si el Presidente cancelaría sus giras para respetar el “quédate en casa”.

Inclusive sugirió que estaría mejor que el Presidente se contagiara para adquirir inmunidad, cuando claramente se encuentra en un sector de alto riesgo por ser mayor de 60 años y tener antecedentes de enfermedades cardiacas.

Otro golpe a su credibilidad lo ha recibido por parte de los Gobernadores, como el de Puebla, Miguel Barbosa, o el de Baja California, Jaime Bonilla, ambos militantes de MORENA, que acusaban que el Gobierno Federal no reportaba de manera fidedigna la cifras que compartían los estados, haciendo una reducción en la estadística.

También hay que recordar que para el 28 de marzo, debido a publicaciones de protestas y quejas de personal médico en distintos hospitales del sistema de salud y difundidas por varios medios, López-Gatell declaró que era falso que hubiera incremento de neumonías atípicas, para posteriormente, el 8 de abril, presentar una gráfica donde se realizaba un comparativo del comportamiento histórico de casos de enfermedades respiratorias, en el cual existía un incremento estadísticamente irregular.

Pero a falta de realizarse pruebas suficientes para confirmar casos de COVID-19, se declaraban como “infecciones respiratorias agudas, neumonías o influenza” por presentar síntomas similares o idénticos.

Conclusión.

Los reportajes pueden resultar tendenciosos e incompletos sin el contexto correcto, pero de igual forma pueden resultar las declaraciones de López-Gatell donde especula que los reportajes pueden ser un ataque coordinado.

La mejor opción es revisar los datos y consultar las fuentes para emitir un juicio objetivo y bien informado.