¿Qué es una persona no humana? ¿Está lista la sociedad para unirse a la lucha de los derechos interespecie? ¿Quién es Sandai? ¿Por qué es un hecho histórico? ¿Qué es un “habeas corpus”?
Llevo 3 meses y medio en Chile (y contando) y he podido conocer un poco de la sociedad en cuanto a intereses, gustos y opiniones. En esta ocasión escuchando “No lloro por ti”, canción de Nacho Vegas y Christina Rosenvinge, del álbum Verano Fatal (2007), empiezo a consumir redes sociales como cualquier día por la mañana y de la nada musicaliza mi realidad la letra que canta:
“No lloro por ti
Lloro por las nubes
Que son de un blanco imposible
Y aquí abajo nada es puro
Todo es feo tan horrible.”
En Twitter aparece la tendencia de un hashtag que desconozco. Leo: #LIBERENASANDAI. Enseguida mi curiosidad aumenta y doy click en la tendencia, encontrándome con fotografías de un orangután en un zoológico. Sigo escroleando y encuentro que en Valparaíso @la_manadakan hicieron una performance para pedir su liberación. Mis ganas de saciarme de una información no han terminado así que comienzo a ver los videos relacionados.
Me voy a Facebook, encuentro a Félix González, Diputado del Distrito No. 20 por el Partido Ecologista Verde explicando ante la Cámara de Diputadas y Diputados de Chile, que no se pudo admitir que la orangután fuera trasladada con otros grandes primates. Y diciendo cómo los cambios culturales de la sociedad comienzan por uno mismo. Opinión con la que concuerdo.
Desde el julio del presente 2022, en Chile, se han estado vertiendo una serie de opiniones encontradas respecto a Sandai, un orangután de Bornio de 28 años de edad, quien se encuentra cautiva en un zoológico ubicado en la comuna de Buin, Región Metropolitana de Chile.
“Lloro por las hojas
Que se caen en el otoño
Ni las miras al pisarlas
Qué pena, qué abandono.”
No es la primera ocasión en que esta apelación es llevada a términos en beneficio de los animales no humanos, pues existen casos anteriores registrados en latinoamérica: Brasil, Ecuador, Argentina, ya tienen hechos similares; pero sí es la primera vez que una tendencia de esta magnitud es puesta en los titulares de noticias de algunos sitios del continente americano.
Cuando no estás en tu patria empiezas a darte cuenta de que pones atención a detalles culturales propios de un sitio que no se parece al lugar en el que creciste y esas diferencias son las primeras que vas a notar. Debo admitir que fue ahí en donde apenas pude considerar en mi mente la idea de una persona no humana, y algo se visualizó en mi interior porque empecé a preguntarme por qué separé inconsciente pero categóricamente en dos a lo natural y luego estar yo. Ahí me di cuenta de lo que podría beneficiar a otros pensando de esta manera, y otros considerando a lo natural general, no sólo a la naturaleza.
Con esto quiero decir que me pude reencontrar con la parte de la naturaleza que también soy yo y por ende pude verles a todos, en este caso a los animales como iguales, no añadiendo caracteres individuales o prejuicos de lo que consideraría yo o no que es un humano, ¿qué me hace humana realmente?
La idea de que los animales deben permanecer en cautiverio para no atentar sobre ellos es propia del siglo XX. Hoy se busca llevarlos a santuarios, o esto se debería buscar porque así se renueva una visión; la de poder considerar la importancia de la emocionalidad de los animales no humanos. Si no somos capaces de darnos cuenta del sentir de otro ser vivo no podemos afirmar que algo está cambiando para beneficio en la manera de actuar sobre nuestra naturaleza animal.
“Lloro por los perros que abandonan en la calle
Lo que sienten, lo que sufren
Nadie lo sabe.”
Sandai ha impactado en el ojo público desde que se presentaron ante la Corte de Apelaciones de San Miguel, por primera ocasión en Chile, el recurso denominado habeas corpus en defensa de un animal no humano, el cual es una institución jurídica que obliga a que cualquier persona detenida sea presentada en un plazo preventivo determinado ante el juzgado pertinente, mismo que podría otorgar la liberación inmediata de quien se apela al no encontrar motivo suficiente para el arresto.
Es entonces en donde Sandai representa no sólo la liberación de una especie, sino también la lucha por los derechos interespecie, pues con esto, se busca el reconocimiento de que el orangután es una persona no humana, y por ende, es titular de derechos básicos, mismos que se han vuelto vulnerados por la privación de libertad en la que se ha mantenido en el zoológico. Se ha tomado la referencia de que sea trasladado al Santuario de Grandes Primates de Sorocaba, Brasil.
LINK DE VIDEO https://www.facebook.com/Felixdiputado/videos/546409653842094
La pieza clave que mueve a este rompecabezas es la visualización de que el ser humano no es el único animal que tiene derechos que deben protegerse ante la mejora de sus condiciones de vida.
Una vez resueltas las preguntas me sigo cuestionando aún así, si la propuesta de la Fundación Justicia Interespecie puede reivindicar la forma de mirar que tenemos de los animales ante la justicia y colocar entonces las bases para que la Suprema Corte pueda considerar lo que en otros sitios ya ha ocurrido para mejora de la especie animal.
¿Seré capaz yo de unirme a la naturaleza y salirme de una vez de la visión antropocéntrica en donde hemos vuelto a caer? ¿Qué es la libertad? ¿Deben liberar a Sandai y empezar a encontrar nuevas definiciones jurídicas que nos catapulten a un pensamiento más sensible ante las dolencias de las formas de vida que habitan el mundo?
“Dictaminará una definición lo que es algo o no, o soy yo quien crea la definición”, un pensamiento en donde podemos dar vueltas como gaviotas sobre el mar, pero no vamos a llegar más que a conclusiones filosóficas cuando lo que nos está pidiendo a gritos el Mundo de hoy es actuar.
Tenemos el desafío de construir sociedades, regiones y comunidades que respeten las diferentes formas de vida, necesitamos en el siglo XXI alcanzar el verdadero desarrollo, ser sensibles ante el dolor no humano.
Los quiere.
N.
