En 1885 el químico farmacéutico y emprendedor John Pemberton, buscando la fórmula ideal para crear un elixir que refrescara y a la misma vez calmara ciertos dolores de guerra, y la encontró de una bebida color oscura, solo que no sabía como llamarla, así que busco a su contador Frank Robinson, quien seguramente estaba llenando una declaración de impuestos y le pidió que la probara, pareciéndole una bebida deliciosa, a lo que le pregunto que como se llamaba, el químico le contestó que justo ese era el problema, que no sabía como nombrarla.
Le dijo que estaba hecha de una hoja que venia de Sudamérica llamada coca y de una nuez africana llamada nuez de cola, entre otros ingredientes, por lo que le dijo que le pusiera Coca Cola, le pidió Pemberton, que le escribiera el nombre en un papel, en aquellos entonces los contadores se distinguían por tener una caligrafía perfecta, pues la totalidad de los papeles de trabajo se elaboraban a mano, y la caligrafía del nombre que hoy conocemos como Coca Cola y su logotipo fue elaborada por el contador Robinson, cosa que no me extraña, pues en mi incipiente andar profesional llegue a ver papeles de trabajo elaborados a mano de manera impresionantemente perfecta la escritura.
También me tocó observar como las máquinas mecánicas empezaron a ser sustituidas por las computadoras, y con eso las sábanas color verde, llenas de columnas para anotar a mano, desde la balanza de comprobación hasta la formación de los estados financieros, estaban desapareciendo.
Así, entonces fui testigo de cómo la escritura dejó de ser importante para los contadores la caligrafía pues iniciaba su desuso y empezamos a ver como cobraron importancia los sistemas computacionales desde el Lotus 1,2,3 hasta el Excel y las modificaciones y mejoras que se le fueron haciendo, hasta la maravilla que es hoy esa hoja de cálculo que nos ahorran mucho del trabajo, que los contadores que nos antecedieron elaboraban a puño y letra.
Esto lo he estado pensando a raíz de que mi hijo Sergio hace unos días me regaló una pluma fuente, pensé que por ser un regalo de mi hijo la iba a utilizar mucho, hoy les puedo decir que la he usado muy poco, solo para toma pequeñas notas, esto porque la mayor parte de mi trabajo la realizo con la computadora, por ejemplo, el Power Point para elaborar materiales para impartir cursos, el Excel para hacer las ya nombradas bojas de trabajo, y el Word para escritos importantes como este, así que la tinta de mi pluma me va durar muchos años, ya me resigne a ello.
Hoy me queda claro que somos esclavos de la tecnología, misma que nos ha ayudado a simplificar en mucho las actividades del día a día no solo a los contadores sino a todas las profesiones desde médicos que se apoyan para elaborar recetas hasta llevar el historial de sus pacientes con todos los datos del historia de sus pacientes, cabe mencionar que los abogados,, hoy muchos de los juicios se pueden llevar en línea, pero como todo en la vida la tecnología tiene dos caras.
La otra cara es que a través de la redes sociales tal es el caso del Facebook, ¿no les ha sucedido que de repente pareciera que nos espían y nos aparecen videos acordes a nuestras forma de pensar e invitaciones de amistad de personas afines? Seguro, la respuesta es positiva, y es que te empiezan a manipular a través de videos que son de tu interés, sin embargo hacen lo mismo a otras personas, incluidos grandes amigos y familiares que piensan de manera contraria a nosotros, por lo que nos han polarizado como sociedad, llegando a hacer comentarios que después uno los lee y pareciera que llegan a ser hasta ofensivos para nuestros amigos o familiares, cuando nos percatamos de ello y si somos humildes ofrecemos disculpas por las ofensas qué vertemos,
Así que si están consciente de ello cuidemos los cometarios en las redes sociales, no permitamos que esas mentes perversas nos polaricen y nos alejen de nuestros seres queridos.
No dejo de pensar que con nuestro teléfono celular saben en donde nos encontramos, en donde vivimos, les permitimos el acceso a nuestra cámara y micrófono, haciéndose vulnerables a quien puede acceder a ellos, ya que les autorizamos a que nos escuchen y nos graben en cualquier momento si somos descuidados.
La tecnología tiene doble filo, busquemos las soluciones para evitar ser vulnerables, hay expertos en tecnología y seguridad personal a los que podemos recurrir para que evitemos la fuga de información a la que estamos expuestos.
