AGENCIAS.- El hecho de tener que dar malas noticias es estresante y si tienes la responsabilidad de dar alguna, en algún punto tendrás que sentarte y entregar una parte de estas noticias incómodas, por lo que ésta es la mejor manera de hacerlo.
Hasta ahora podías probar para amortiguar esa información con una apertura que intenta ablandar el momento. Sin embargo, esto sólo es una movida ‘caritativa’, y una nueva investigación sugiere que lo mejor que puedes hacer por la persona que está frente a ti es ir ‘directo al grano’ cuanto antes.
Presentado con varios ejemplos de malas noticias, desde “la bolsa de aire de su coche está dañada y puede matarte” hasta “sus resultados sugieren que tiene cáncer”, las 145 pruebas sujetas al estudio reciente, arrojan que se prefiere los mensajes directos en todos los casos por encima de los preámbulos largos con la intención de aminorar el impacto.
Los casos del estudio muestran que los mensajes directos son limpios y eficientes cuando las noticias son impersonales.
Con respecto a situaciones sensibles como rupturas y despidos, el ser directos siguió siendo la opción preferida, amortiguado por un preámbulo muy breve. Pero en esas difíciles conversaciones, las personas no sólo aplauden la franqueza por su claridad. También la miran como una forma compasiva.
“Los mensajes negativos sobre factores sociales fueron percibidos como optimistas cuando había una pequeña introducción para suavizar la charla. Este puede ser tan solo una oración como ‘Necesitamos hablar'”, dijo Alan Manning, lingüista y profesor de inglés en la Universidad Brigham Young, uno de los co-autores del estudio.
El consultor de negocios, Ron Carucci, aconsejó recientemente en la Harvard Business Review, prepararse para este tipo de conversaciones, escribiendo un mensaje con sólo dos o tres enunciados de valor sin más rodeos.