La semana pasada el titular de la Unidad de Inteligencia Financiera, Santiago Nieto Castillo, reveló que se investiga a titulares de ejecutivos locales.
Con el majestuoso marco de Palacio Nacional -y con la carga política que ello implica- explicó a mis colegas reporteros, que se presumen posibles casos de lavado de dinero y que se incluye a exmandatarios. Es decir, la UIF trae en la mira a gobernadores -que están cumpliendo su mandato- y también a algunos personajes que ya entregaron el cargo.
¿Pero quién es Nieto Castillo? Es un abogado, académico y jurista que fue titular de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales, adscrita a la entonces PGR.
Fue quien a finales de 2015 presentó una denuncia contra el entonces subsecretario de Prevención y Participación Ciudadana de la Secretaría de Gobernación, Arturo Escobar y Vega, por su presunta participación en delitos de carácter electoral, mientras fue secretario de procesos electorales del Partido Verde Ecologista de México.
Nieto, ya para 2017, informó que obtuvo una orden de aprehensión en contra del ex gobernador de Chihuahua, César Duarte Jáquez, por el financiamiento ilegal de campañas en favor del PRI.
Sí, es el mismo personaje que investigó el caso Odebrecht, donde varios países de América Latina se vieron involucrados en casos de terrible corrupción electoral. Obviamente México no fue la excepción y Santiago Nieto fue quien reveló el nombre de Emilio Lozoya Austin, ex director general de Pemex, y ex coordinador de vinculación internacional de la campaña de Peña Nieto, quien habría recibido jugosos sobornos.
Obviamente corrieron a Santiago Nieto; se había metido con personajes muy cercanos al gran poder en turno: Escobar, Duarte Jáquez y Lozoya.
Pero en mayo de 2018, el ex fiscal del PRI, se fichó en la campaña del candidato de la coalición Juntos Haremos Historia, López Obrador;, muchos empezaron a temblar. Y cuando posteriormente fue nombrado titular de la UIF se mordieron las 20 uñas y les dio un ataque de pánico.
Así están muchos exgobernadores y mandatarios locales que están a punto de entregar al poder: nerviosos, inquietos, angustiados, histéricos, e intranquilos.
Si pronto se anuncian investigaciones y se divulgan fortunas creadas durante su paso por palacios de gobierno, millones aplaudirán la decisión de la Cuarta Transformación de combatir la corrupción; mientras tanto, aquellas familias acostumbradas a la frivolidad y al dispendio están calladitas y frotándose las manos sudorosas, porque pronto todo el teatro podría venirse abajo.
La pregunta del millón es ¿qué ex gobernadores caerán y que mandatarios en turno tendrán que dimitir, en medio del escándalo, por sus abultadas y inexplicables riquezas?
La advertencia está, y no fue una ocurrencia del titular de la UIF; sólo falta la decisión política del Presidente de la República para empezar a actuar. Así, Santiago Nieto, le cambiará el rumbo a la historia.