Impacto económico de la invasión rusa a Ucrania

Maestro Alejandro Gómez Tamez, analista platino

Ahora en día una pregunta frecuente tiene que ver con las repercusiones económicas para el mundo que tendrá la invasión de Rusia a Ucrania. Cada día que pasa el costo para los países involucrados, Europa y el mundo, va en aumento. Otra pregunta común es sobre los factores que darán forma a la manera cómo este conflicto podría terminar. En lo personal, no soy experto en el tema, pero he recopilado opiniones e información de diversas fuentes, misma que presento en esta entrega.

En un artículo editorial de Charles Riley, titulado ¿Cómo la invasión de Rusia a Ucrania cambió la economía mundial en una semana?, y publicado el jueves 3 de marzo en el portal de noticas de CNN.com, se nos da una muy buena explicación de las principales sanciones que Occidente ha puesto en contra de Rusia con el fin de disuadirla de continuar con la destrucción de su vecino, así como del impacto que hasta ahora éstas han tenido.

Tras una semana y media de guerra en Ucrania, la economía mundial se ha estremecido por las severas sanciones occidentales que han aislado a Rusia, colapsaron su moneda y sus activos financieros, además de que han disparado al alza los precios de la energía y los alimentos.

La economía rusa es de 1.5 billones de dólares es la undécima más grande del mundo, según datos del Banco Mundial (como referencia la de México es de 1.25 billones de dólares). Todavía hasta finales de febrero de este año, le iba muy bien con un gran comercio de energía, exportando millones de barriles de crudo por día con la ayuda de las principales compañías petroleras globales. Las grande empresas y marcas occidentales estaban haciendo buenos negocios en Rusia y los fondos globales de inversión le prestaban a las empresas rusas.

Ahora, un aluvión de sanciones ha vuelto radiactivos a los bancos más grandes de Rusia, los comerciantes evitan comprar los barriles de petróleo crudo de los Urales y las empresas occidentales están huyendo del país o cerrando sus tiendas. Las acciones de empresas rusas han sido expulsadas de los índices globales y el comercio bursátil de algunas empresas rusas se ha detenido en Nueva York y Londres.

Las sanciones tienen un gran impacto

La invasión de Ucrania por parte del presidente ruso Vladimir Putin ha recibido una respuesta sin precedentes de los Estados Unidos, el Reino Unido, la Unión Europea, Canadá, Japón, Australia y otros países. Incluso Suiza, famosa por su neutralidad y secreto bancario, se ha comprometido a imponer sanciones a Rusia. Al día de hoy México no ha impuesto ninguna sanción unilateral en contra de Rusia.

Las sanciones que hasta ahora se han anunciado han impedido que los dos bancos más grandes de Rusia, Sberbank y VTB, negocien en dólares estadounidenses. Occidente también eliminó a siete bancos rusos, incluido VTB, del sistema SWIFT, un servicio de mensajería global que conecta a las instituciones financieras y facilita pagos rápidos y seguros.

La coalición está tratando de evitar que el banco central de Rusia venda dólares y otras monedas extranjeras para defender el rublo y su economía. El tipo de cambio pasó de 83.30 rublos por dólar el 27 de febrero a 122.48 rublos por billete verde el 4 de marzo, lo que implica una depreciación de la moneda rusa de 32%. Esto a pesar de que la tasa de interés objetivo del banco central ruso se elevó de 9.5% a 20.0% de un día para otro el pasado 28 de febrero.

En total, casi $1 billón en activos rusos ahora han sido congelados por sanciones, según el ministro de finanzas francés, Bruno Le Maire. Este hecho ha provocado la reflexión, sobre todo de países como China, de lo que constituyen las reservas soberanas internacionales, ya que se da demostrado que Estados Unidos y la Unión Europea, puede negar el acceso a ellas, pero este será el tema de otra entrega.

“Las democracias occidentales han sorprendido a muchos al seguir una estrategia de ejercer una intensa presión económica sobre Rusia aislándola efectivamente de los mercados financieros globales”, dijo Oliver Allen, economista de mercados de Capital Economics, en una nota de investigación. Agregó que “Si Rusia continúa por el mismo camino, es bastante fácil prever que las  sanciones más recientes podrían ser solo los primeros pasos para una ruptura severa y duradera de los lazos financieros y económicos de Rusia con el resto del mundo”.

El petróleo ha subido 20%

La economía de Rusia es importante para el resto del mundo debido a sus vastos recursos energéticos.

Hasta ahora las exportaciones de petróleo y gas del país no han sido objeto directo de los gobiernos occidentales, pero eso no ha impedido que los precios se disparen en los últimos días. Mientras que el petróleo ruso cotiza con su mayor descuento en más de 30 años.

Esto es porque a Moscú le resulta más difícil vender su petróleo a compradores extranjeros preocupados por posteriormente sufrir las consecuencias de las sanciones financieras. Los operadores de petroleros desconfían del riesgo para los barcos en el Mar Negro, y las principales compañías petroleras mundiales están abandonando las operaciones en el país.

Los futuros del crudo Brent, el punto de referencia mundial, han aumentado aproximadamente un 20% desde el comienzo de la invasión para negociarse cerca de $115 por barril. Los futuros del petróleo de EE.UU. han subido al nivel más alto desde 2008. En Europa, el precio del gas natural al por mayor se disparó a un máximo histórico.

Los enormes aumentos de precios harán que las gasolinas y diesel sean más caros en todo el mundo, elevando el costo de los viajes y los desplazamientos. Esto se sumará a las presiones inflacionarias actuales y podría actuar como un lastre para el crecimiento económico, reavivando los temores de estanflación y complicando las decisiones de los bancos centrales mundiales en su intento de contrarrestar el aumento de los precios. En este sentido, la probabilidad de un aumento de medio punto porcentual en la próxima reunión del Banco de la Reserva Federal de los Estados Unidos ha disminuido y ahora se ve más probable un alza de 0.25 puntos en su tasa de interés de fondos federales.

Otros commodities también están aumentando

La crisis también está agregando presión a las cadenas globales de suministro, mismas que ya estaban bastante estresadas, antes de la invasión. Juntos, Ucrania y Rusia, son responsables de alrededor del 14% de la producción mundial de trigo y suministran el 29 % de todas las exportaciones de este grano. Los futuros del trigo se han disparado, lo que hace que el producto sea más caro para los fabricantes de alimentos, quienes probablemente pasarán esos costos a los consumidores.

Los precios del aceite de palma también se han disparado a medida que los mercados luchan por encontrar alternativas a los envíos de aceite de girasol atascados en los puertos del Mar Negro.

De acuerdo a una nota de Bloomberg, del 3 de marzo, el trigo se disparó al nivel más alto desde 2008 por los crecientes temores de una escasez mundial. La molienda de trigo en París alcanzó un precio sin precedentes de 400 euros ($438) por tonelada. Los metales básicos también subieron aún más después de que el índice de metales LMEX, que abarca seis metales importantes, alcanzó un récord.  El aumento de los precios de la energía se ha sumado a la inercia de aumento de costos. El aluminio, uno de los metales que más requieren energía, subió hasta un 4% a 3,867 dólares la tonelada en la Bolsa de Metales de Londres, un nuevo récord, mientras que el níquel, otro metal clave para las baterías, saltó con fuerza en Londres para negociarse brevemente por encima de los 30,000 dólares la tonelada. por primera vez desde 2008. El cobre también se acerca a su máximo histórico. Las existencias en almacenes rastreadas por la LME cayeron al nivel más bajo desde 2005.

Y podría empeorar. En un escenario en el que los combates en Ucrania se prolonguen hasta bien entrado 2023 y Rusia corte el suministro de gas natural a Europa durante seis meses como represalia por las sanciones adicionales que le han impuesto, la inflación de la eurozona superará el 7% en el tercer trimestre de este año, según Oxford Economics. La inflación del Reino Unido superaría el 10%.

Rusia soportaría la mayor parte del dolor económico. En el escenario esbozado por Oxford Economics, la producción económica de Rusia en 2023 estaría un 7% por debajo de los niveles que habría alcanzado sin una invasión. El crecimiento global ese año se reduciría en 1.1 puntos porcentuales, según la firma de investigación.

Aunado a lo anterior, en una nota del Wall Street Journal, publicada el 3 de marzo y firmada por William Boston, se menciona que después de una pandemia y una crisis mundial de chips, la guerra de Rusia en Ucrania ha desatado la tercera crisis de la cadena de suministro de los fabricantes de automóviles en muchos años. Los combates en Ucrania han cerrado las plantas de proveedores industriales pequeños pero importantes, inclusive cerrando fábricas lejos de la zona de conflicto, mientras que las sanciones y las rutas comerciales que han sido cortadas, están obstaculizando los envíos de automóviles y refacciones hacia y desde Rusia, que alguna vez se consideró un mercado en crecimiento.

Como ejemplo, menciona que después de dejar inactivas dos fábricas en el este de Alemania, Volkswagen ha dicho que la producción pronto se verá afectada en su planta insignia en el oeste de Alemania debido a la falta de piezas de Ucrania. Y los fabricantes que operan plantas en Rusia dicen que el estrés en las cadenas de suministro ha empeorado por la exclusión de Rusia del sistema de pagos interbancarios internacionales SWIFT. El bloqueo del espacio aéreo ruso y las interrupciones en las rutas de navegación han reducido el movimiento de mercancías a un nivel mínimo.

Las empresas globales luchan por adaptarse

Hasta el momento de escribir estas líneas, las riquezas energéticas de Rusia no han sido el objetivo directo de las sanciones occidentales, pero muchas de las compañías petroleras más grandes del mundo están abandonando el país o deteniendo nuevas inversiones en proyectos para explorar y desarrollar campos.

ExxonMobil dijo el martes 1 de marzo que estaba abandonando su más reciente proyecto en el país, Sakhalin-1, que fue catalogado como “una de las inversiones directas internacionales más grandes en Rusia”. Una subsidiaria de Exxon era el operador del proyecto, y la decisión de la empresa de retirarse pondrá fin a su presencia de más de 25 años en Rusia.

BP, Shell y la noruega Equinor han dicho que tienen la intención de abandonar sus negocios rusos no obstante que resentirán un probable impacto de miles de millones de dólares en sus balances. Por su parte, TotalEnergies de Francia ha detenido nuevas inversiones.

El éxodo empresarial se ha acelerado en los últimos días y ha llegado a casi todos los sectores de la economía. Los gigantes tecnológicos, fabricantes de automóviles, minoristas y aerolíneas han suspendido sus operaciones en Rusia. Las líneas de transporte de contenedores han reducido drásticamente sus servicios. Los bancos occidentales están tratando de averiguar qué tan expuestos están al tambaleante sistema financiero de Rusia. Visa y Mastercard ya no funcionan en Rusia. Boeing y Airbus no darán servicio a la flota rusa.

De acuerdo con el Boston Globe, al 3 de marzo, estás son las principales empresas que han roto los lazos comerciales con Rusia:

Energía

·        BP anunció planes para salir de su participación del 20 por ciento en Rosneft, el gigante petrolero ruso.

·        Shell saldrá de su empresa conjunta con Gazprom de Rusia y finalizará la financiación del gasoducto Nord Stream 2.

·        ExxonMobil abandonará las operaciones de petróleo y gas en Rusia, valoradas en aproximadamente 4,000 millones de dólares.

Fabricantes de automóviles

·        El fabricante de automóviles sueco Volvo Cars suspendió los envíos de automóviles a Rusia “hasta nuevo aviso”.

·        General Motors suspenderá la exportación de vehículos a Rusia, aunque solo vende unos 3,000 coches al año en el país.

·        Ford ha suspendido sus operaciones en Rusia.

·        BMW detendrá las exportaciones de vehículos a Rusia y dejará de ensamblar vehículos con un socio en Kaliningrado.

Tecnología

·        Dell ha suspendido las ventas de productos.

·        Apple detuvo las ventas de productos y limitó Apple Pay Russia, deshabilitó Apple Maps en Ucrania y eliminó los medios de comunicación estatales rusos de su App Store.

·        DirecTV eliminará el canal respaldado por el Kremlin, RT, de sus paquetes de televisión de paga. El distribuidor de transmisión Roku también eliminó RT de su tienda de canales.

·        La empresa de software informático de Boston, PTC, ha interrumpido sus operaciones en Rusia.

Venta minorista

·        El propietario de Zara, Inditex, dijo que cerrará temporalmente sus más de 500 tiendas en Rusia, así como sus operaciones en línea allí.

·        El gigante minorista de Framingham TJX Cos. venderá su participación en Familia, la cadena de más de 400 tiendas de ropa y moda para el hogar en Rusia.

·        Harley-Davidson ha suspendido los envíos a Rusia.

·        Adidas suspendió su asociación con la Federación Rusa de Fútbol.

·        Nike dejó de aceptar pedidos en línea en su sitio web ruso porque no puede garantizar la entrega.

·        H&M pausará temporalmente todas las ventas en Rusia.

·        Canada Goose suspendió todas las ventas mayoristas y de comercio electrónico a Rusia.

 

Viaje

·        Boeing suspendió operaciones importantes en Moscú y cerró temporalmente su oficina en Kiev.

·        General Electric ha detenido temporalmente el apoyo a las aerolíneas en Rusia para cumplir con las sanciones.

·        La empresa de reservas de viajes en línea Expedia cesó la venta de viajes hacia y desde Rusia.

·        Oversees Adventure Travel ha detenido todos los viajes a Rusia y Ucrania.

Otros

·        Las compañías de mensajería como UPS, FedEx y Maersk ya no prestan servicios en Rusia. (Maersk dijo que continuará enviando “alimentos, suministros médicos y humanitarios”).

·        Walt Disney, Warner Bros., Sony, Paramount y Universal están pausando los estrenos cinematográficos en Rusia.

Cinco factores que determinarán el resultado de este conflicto

Cómo lo comenté en la introducción de esta entrega, ahora en día una de las mayores preguntas es cómo es que pudiera terminar esta guerra. Respecto a ese asunto, el pasado 2 de marzo, Stephen Fidler escribió un editorial en el Wall Street Journal titulado “¿Cómo podría terminar la guerra en Ucrania? Cinco factores darán forma al resultado”. A continuación se presentan los puntos más relevantes.

Las cosas parecen indicar que la invasión de Ucrania por parte de Vladimir Putin no va según lo planeado hasta ahora, según los estrategas militares, y Rusia enfrenta una resistencia armada más dura de lo esperado, además de las duras sanciones económicas arriba mencionadas. Esto abre la pregunta respecto a lo que sigue. Y aunque es casi imposible predecir lo que sucederá, los estrategas militares se están enfocando en varios factores para brindar pistas, incluido el desempeño de los ejércitos en el terreno y el impacto de las sanciones.

Una cosa que queda clara es que el desempeño de las fuerzas armadas de Rusia, hasta el momento, le ha mostrado a Putin que su ejercito no es lo que él creía, por lo que se altera la gama de resultados posibles. “Todos los días los ucranianos no pierden, ganan políticamente”, dijo Michael Clarke, exdirector del Royal United Services Institute, un grupo de expertos de Londres. “Y el costo político para Putin aumenta a diario”.

Lawrence Freedman, profesor emérito de estudios de guerra en el King’s College de Londres, no cree que los rusos logren instalar un gobierno títere en Ucrania. “No pueden ocupar todo el país”, dijo. “Un gobierno títere en Kiev que no esté respaldado por armas rusas no tendría ninguna legitimidad y no sobreviviría”.

Aquí hay cinco variables que, según los analistas militares, podrían determinar el curso de la guerra:

1.     Fuerzas invasoras

Los analistas militares occidentales han expresado su sorpresa por el mal desempeño de las fuerzas rusas durante los primeros días de la invasión. Esperaban que un ejército que se había modernizado durante más de una década sofocaría la primera fase de la resistencia ucraniana con bastante facilidad. Pero Rusia no ha emprendido ninguna operación militar que combine diferentes ramas del ejército desde que los soviéticos invadieron Afganistán en 1979, y eso no fue tan complejo.

“Todos nos hemos quedado asombrados de que este nuevo ejército ruso se parezca al antiguo Ejército Rojo, no muy bien entrenado, no muy bien comandado, con una logística bastante pobre, lo que implica una gran falla de planificación o… una gran subestimación del enemigo”, dijo Clarke, ex director del Royal United Services Institute. La fuerza aérea, la armada y la fuerza nuclear de Rusia se han modernizado parcial o completamente, dijo, pero parece que el ejército no ha superado las debilidades del pasado.

Es posible que Moscú restringiera deliberadamente su campaña al principio de la guerra, esperando una resistencia significativamente menor de la que encontraron. Podría continuar con esas tácticas, esperando eventualmente agotar a la oposición. El escenario más probable, según algunos analistas militares, es que los rusos vayan utilizando una potencia de fuego significativamente mayor para adentrarse más en Ucrania, asediando ciudades o usando armamento pesado contra ellas. Esto hará que Putin arremeta y se vuelva realmente cruel, use fuego indiscriminado y artillería masiva en áreas urbanas y arrase ciudades ucranianas. La consecuencia será un costo terrible en bajas humanas.

2.     Fuerzas defensoras

Hasta ahora, las fuerzas ucranianas han aprovechado al máximo sus activos militares frente a un adversario más grande y más avanzado. El lento progreso de Rusia es “ante todo un testimonio del coraje y la tenacidad del ejército ucraniano y los voluntarios que están luchando increíblemente bien y de manera impresionante”, dijo el general Richard Shirreff, ex comandante militar adjunto británico de la Organización del Tratado del Atlántico Norte. La moral es un factor muy importante en la guerra, dijo, y los ucranianos creen que tienen la fuerza moral.

La determinación declarada del presidente Volodymyr Zelensky de permanecer en el cargo ha ayudado a sostener la campaña de Ucrania. Sus apariciones en las redes sociales, junto con imágenes de video de la resistencia de los ucranianos comunes, han ayudado a Kiev a ganarse la simpatía en casa y en Occidente. Rusia, sin embargo, ya ha comenzado a atacar antenas de telefonía móvil y torres de televisión para detener la difusión de dicha información.

Cuanto más tiempo pueda resistir el ejército formal de Ucrania, más aumentan los problemas de Putin, dijeron analistas militares. La mayoría de los analistas piensan que el ejército ucraniano tarde o temprano se derrumbará. Está luchando con todo lo que tiene todo el tiempo, sin tregua. Rusia puede seguir reforzando sus líneas de frente con tropas frescas.

La pregunta es: ¿Entonces qué? La suposición común es que Moscú buscará instalar un gobierno títere en Kiev, dejándolo en manos del oeste del país, mientras se anexiona una gran parte del país al este del río Dnipro, que es el que divide la capital Kiev.

Una posibilidad es que el ejército formal de Ucrania desaparezca y comience una insurrección. Los analistas dijeron que esperaban que las naciones occidentales apoyaran tal insurgencia, como Estados Unidos apoyó la resistencia a la ocupación soviética de Afganistán en la década de 1980. Si se materializa una fuerte insurgencia, Rusia podría necesitar dedicar muchas más tropas para combatirla. Las estimaciones de expertos sobre cuántas tropas se necesitarían para controlar y ocupar una Ucrania rebelde ascienden a más de 500 mil. “Putin no tiene eso, y se quedará sin gente, y se convertirá en una redux entre la Unión Soviética y Afganistán”, dijo el general Shirreff.

3.     Respuesta de Occidente

Los gobiernos occidentales han descartado una participación militar directa en Ucrania, incluida la posibilidad de una zona de exclusión aérea que los llevaría a un conflicto directo con la fuerza aérea rusa. En cambio, han optado por envíos de armas para ayudar a los ucranianos a defenderse y han reforzado el número de tropas en los países más orientales de la OTAN.

Existe la posibilidad, dijeron los analistas, de que Rusia intente cerrar la frontera entre Ucrania y Polonia para detener el flujo de armas occidentales, un paso que aumentaría el riesgo de que el conflicto se intensifique para involucrar a los países de la OTAN, de los cuales Polonia es uno.

El arma más grande desplegada por las naciones occidentales ha sido la serie de sanciones económicas dirigidas a la economía de Rusia y a sus líderes. Los rusos han esperado en largas filas frente a los bancos para retirar dinero y es probable que la inflación se dispare. Muchos rusos están sintiendo dificultades económicas.

Esas sanciones pueden aumentar o disminuir dependiendo de lo que haga Rusia, pero tampoco estarán libre de costo para Occidente. Es probable que intensifiquen un problema de inflación existente y, si Rusia toma represalias cortando el suministro de energía, podría conducir al racionamiento de electricidad en Europa.

Sherr, del Instituto de Política Exterior de Estonia, no espera que las medidas económicas de Occidente hagan cambiar de opinión a Putin. “Putin y las personas que lo rodean, al menos las personas políticas y de seguridad que lo rodean, nunca se han doblegado a la lógica de las sanciones”, dijo.

Por el momento, parece haber un amplio apoyo popular en Occidente para Ucrania, cuyo pueblo es visto como víctima de una guerra injustificada y no provocada. Eso podría fortalecer a los gobiernos para mantener las sanciones. Con el tiempo, sin embargo, esa unidad podría erosionarse ante las dificultades económicas que Occidente también enfrentará.

Cualquier paz ambigua impuesta a Ucrania por Moscú podría dejar a Occidente debatiendo cómo calibrar cualquier levantamiento de sanciones. Algunas podrían levantarse rápidamente, pero otras, como los que se impusieron contra los líderes rusos, podrían ser más complicadas en caso de posibles juicios por crímenes de guerra.

Los analistas dijeron que un país que podría tener más influencia en Rusia es China, cuyos líderes probablemente estén preocupados por la perspectiva de una escalada militar.

4.     Reacción rusa

Esta es una gran incógnita. No solo es difícil para los occidentales leer la opinión rusa, sino que es difícil saber qué efecto tiene en la toma de decisiones en Moscú, particularmente en un presidente que se considera cada vez más aislado y fuera de contacto.

La mayoría de los rusos obtienen su información de transmisiones de televisión censuradas, por lo que muchos creerán que las dificultades económicas que están sufriendo no son culpa de su gobierno sino de Occidente.

Las autoridades rusas han reprimido las manifestaciones contra la guerra. Ya hay algunos signos de inquietud entre las élites rusas cuyo lujoso estilo de vida que han disfrutado en Occidente ahora está amenazado. Si a Putin le importa es otra cuestión.

Las dificultades económicas que ya han surgido socavan un pilar de la presidencia de Putin: que trajo estabilidad a un país que era caótico en la década de 1990 bajo su predecesor Boris Yeltsin.

Sumado a eso, cualquier campaña prolongada contra la insurgencia en Ucrania costaría la vida de muchos soldados rusos, un factor que en el pasado ha agitado incluso a elementos conservadores de la población que normalmente apoyarían a Putin. “Putin no tiene tiempo indefinido para resolver esto”, dice el Sr. Freedman del King’s College. “Las dificultades económicas recién ahora comienzan a sentirse. No puede dejar que esto se alargue durante semanas y meses, que es el tiempo que pueden durar los asedios, y mucho menos las insurgencias. Así que el tiempo es un verdadero problema para él”.

5.     Conversaciones de paz

Rusia y Ucrania han mantenido conversaciones de paz. Muchos estrategas se sienten pesimistas respecto a que puedan conducir a una resolución rápida. Cualquier acuerdo de paz con Zelensky podría implicar una pérdida de prestigio para Putin porque ha calificado a la administración ucraniana, falsamente, como un grupo de neonazis. Pero un acuerdo con cualquier gobierno que instalen los rusos no tendría legitimidad dentro o fuera de Ucrania.

Las variables en las conversaciones giran en torno a dos objetivos rusos: la neutralidad ucraniana y el territorio ucraniano.

Rusia anexó Crimea en 2014 y probablemente buscaría la aceptación de Ucrania. También podría tratar de absorber más territorio al este del río Dnipro.

Es posible que Rusia intente “dividir Ucrania en partes y dejar en paz a Ucrania occidental”, dijo Angela Stent, especialista en asuntos de Rusia en la Universidad de Georgetown. Pero debido a que eso dejaría un gobierno de tendencia occidental en Kiev que Putin ha descrito anteriormente como ilegítimo, dijo: “Me resulta difícil imaginar eso”.

Lo más probable, dijeron los analistas, es que Rusia, como mínimo, busque una constitución de Ucrania que otorgue una independencia significativa al este del país y un veto efectivo sobre la acción del gobierno ucraniano.

Clarke dijo que un modelo de neutralidad ucraniana que podría atraer a Rusia es el de Austria en 1955. Los soviéticos se retiraron de Austria a cambio de una garantía constitucional de neutralidad que existe hoy. En lugar de persuadir a los ucranianos de que la neutralidad es una opción atractiva, es probable que la invasión endurezca la opinión en la dirección opuesta.

Conclusiones

Quien no esté preocupado por la invasión de Rusia a Ucrania, debería estarlo. No es porque podamos hacer algo al respecto, pero me parece que es un asunto delicado que no podemos pretender que no existe. Y es que aunque el conflicto se mantenga limitado hacía dentro de las fronteras ucranianas, el impacto económico para el resto del mundo ya es un hecho. Mayor inflación general, y en específico en alimentos y energéticos, es algo que estaremos atestiguando. Una mayor inflación puede provocar que se endurezcan aún más las políticas monetarias restrictivas, con alzas en tasas de interés más grandes y por un periodo de tiempo más largo. En el caso de México, calculando la tasa de interés implícita de los Cetes a 28 días, el mercado está descontando que en un año la tasa de estos instrumentos será de 7.75%.

Desde luego que hay un riesgo permanente de que el conflicto escale a otras naciones europeas, como Polonia, con algún ataque deliberado por parte de Rusia. Putin busca lograr su objetivo de destruir a Ucrania lo más rápido posible, al costo más bajo para él, por lo que la crueldad por parte del ejército ruso irá en aumento. Como se menciona en esta entrega, es altamente probable que Ucrania acabe partida en dos, una parte occidental y una oriental. Ya se cerraron los corredores humanitarios que apenas se habían abierto, ya que no se respetaron los acuerdos; hay más de 1.5 millones de ucranianos que han escapado y dejado todos sus bienes atrás. La situación es verdaderamente preocupante desde el punto de vista humanitario, político y económico.