Guanajuato Guanajuato a 14 de julio de 2021.- Flaca y Luisa son las inquilinas más antiguas y más queridas del congreso del estado de Guanajuato, pues llegaron a habitarlo inclusive antes que los propios diputados, cuando su construcción aún no concluía.
Se trata de dos perritas que eran de la calle hasta que el recinto legislativo se convirtió en su hogar, es el propio personal del congreso quien se encarga de su alimentación, cooperan para sus croquetas, vacunas y hasta juegan con ellas.
0:26”Flaca llegó en el 2015 aquí al congreso y llegó para quedarse y ya en el 2016 llegó Luisa, que es como le decimos de cariño. Nosotros aquí en el
Congreso llegamos en octubre del 2016 como tal a ocupar las instalaciones, cuando todavía estaba la gerencia de obra y terminándose la construcción del edificio llegó aquí la flaca, la adoptaron y ya no se fue” explica Hugo Aguiñon, director de servicios generales del Congreso, quien se encarga de su cuidado.
Ambas, juguetonas por naturaleza pasan las tardes recorriendo los amplios jardines e interactuando con los visitantes. Cuando cae la noche se resguardarán en su pequeña casa colocada a un costado de la enorme e imponente estructura de cristal que enmarca al congreso.
2:53”No son de una raza en específico, es hasta esta legislatura donde la entonces diputada Ale Gutierrez le da un poco más de auge al trato de las perritas y les puso su collar y la placa con el nombre de cada una de ellas” 3:15 agregó
El amor por los animales se ha demostrado no solo en el buen trato y cuidados para flaca y Luisa,pues el pasado 3 de junio el pleno del congreso del estado de Guanajuato aprobó reformas a la Ley para la Protección Animal de tal manera que los animales domésticos sean considerados seres sintientes.
Esta ley contempla que, la persona que intencionalmente realice actos de crueldad o maltrato en contra de algún animal doméstico se le impondrá una multa que va desde los 4 mil 481 pesos hasta 17 mil 924 pesos
En diciembre de 2020 también se presentó una iniciativa de ley para prohibir y castigar a todo aquel que realice peleas de perros, con penas de hasta 6 años de prisión.