‘Fase Uno’ de acuerdo entre China y EU no es más que un ‘pequeño respiro’ para Xi Jinping

'Fase Uno' de acuerdo entre China y EU no es más que un 'pequeño respiro' para Xi Jinping
'Fase Uno' de acuerdo entre China y EU no es más que un 'pequeño respiro' para Xi Jinping. Fuente: AP

Agencias.-Para el presidente chino, Xi Jinping, la ‘fase uno’del acuerdo comercial con Estados Unidos no es exactamente una razón para abrir el champán y celebrar.

Después de meses de arduas negociaciones, falsos comienzos y algunas frustraciones, el acuerdo anunciado el viernes por la noche ayuda a mantener una relación que parecía ir en caída libre.

Si bien eso es importante para Xi, quien se ha enfrentado a un creciente descontento social a medida que la economía crece a su ritmo más lento en casi tres décadas y cuando las protestas en Hong Kong no ven su fin, no deja de ser más allá de un respiro temporal para el presidente chino.

El acuerdo no hizo nada para abordar las políticas industriales que han generado frustraciones con China en Washington. Tampoco reducirá la intensificación de la competencia entre las dos partes por el futuro de la tecnología 5G o los ‘puntos calientes’ geopolíticos como Taiwán y el Mar del Sur de China. Áreas que, según los críticos de Xi, podrían haberse abordado mejor.

“Todo lo que ha podido hacer es luchar contra el otro lado en un empate desordenado que no ha resuelto ninguna de las rivalidades subyacentes. Las dos partes inevitablemente volverán a chocar “, consideró Richard McGregor, miembro del Instituto Lowy, con sede en Sydney.

Por el momento, Xi puede señalar algunos aspectos positivos del acuerdo. Si bien no redujo los aranceles como exigió Beijing, la suspensión de futuros impuestos de ese tipo ayuda a brindar cierta certeza a los inversores que han visto caer las exportaciones chinas a EU en 10 de los 11 meses de este año.

Charles Liu, un exnegociador económico con la delegación china en las Naciones Unidas y fundador de Hao Capital, dijo que el acuerdo ayudará a poner fin al nacionalismo inspirado en la guerra comercial que dificultaría el compromiso y obstaculizaría los planes de desarrollo a largo plazo de China.

También comentó que ayudaría a Xi a refutar las críticas sobre su política exterior más asertiva.

“El acuerdo significa que puede mostrar claramente a la población que está tratando de formar una relación más colaborativa con los Estados Unidos”, explicó Liu.

“Han habido algunas críticas dentro del país para que China salga al frente global de manera demasiado agresiva demasiado pronto. Esto ayuda a reducir esa presión “.

Pero China es muy consciente de que persisten grandes obstáculos, y lo anterior se refleja en la cobertura por parte de los medios de comunicación estatales que minimizaron la noticia y señalaron que esto únicamente podría estabilizar la economía.

Hu Xijin, editor del periódico Global Times, señaló que China “sintió la fuerza de los Estados Unidos” durante la guerra comercial y pidió a ambos países que se respeten mutuamente para evitar “un choque estratégico cruel”.

El punto crucial puede ser el futuro del 5G y el destino de Huawei, la compañía tecnológica líder de China. La administración de Trump ya la golpeó con sanciones y trató de enjuiciar a su directora financiera, Meng Wanzhou.

Ahora, tanto Estados Unidos como China están compitiendo para convencer a las naciones de todo el mundo a seguirles, a veces utilizando amenazas: el sábado, el embajador de China en Alemania amenazó con represalias si Huawei era excluido como proveedor de equipos inalámbricos 5G.

En el terreno, los funcionarios chinos se están preparando para que la guerra tecnológica continúe indefinidamente.

“Existe este ímpetu para desacoplarse a un nivel muy detallado”, mencionó Paul Triolo, jefe de política tecnológica global en Eurasia Group, quien destacó que China ha enviado funcionarios a las empresas para verificar qué nivel de dependencia tienen de la tecnología estadounidense.

“Parece que hay resignación de que Estados Unidos no va a ceder”, añadió.