Esperan que cuaresma sea un respiro para comerciantes en León

En los mercados de León ven la cuaresma como una oportunidad para incrementar los ingresos. Foto: Christian Rendón

León, Gto., 16 de febrero de 2021.- Comerciantes de pescados y filete cazón esperan que las ventas mejoren durante la temporada de Cuaresma que comienza el próximo miércoles, ya que el 2020 les dejó muy mal sabor de boca.

Aseguraron que los precios se mantuvieron, sólo uno o dos productos subieron unos pesos, pero no son de los que más lleva la clientela.

Según locatarios del mercado Aldama, el kilo de filete anda entre los 130 y 150 pesos, dependiendo, y el de pescado puede subir hasta los 180 o’ 200.

Jorge Sevilla tiene su local del lado de la avenida Miguel Alemán y platicó que las ventas son desde este lunes y duran hasta siete semanas, por lo que ya están preparados.

“Hay cazón blanco, tiburón grillo, tenemos mojarra, sierra huachinango, lo que la gente se lleva más es el filete de cazón, anda en 130 (pesos), 140 y 150, el huachinango anda en 200, la mojarra 80, lo que más compra la gente es el huachinango, ceviche”, dijo.

Espera que este año la situación mejore ya que el 2020, cuando inició la pandemia, la situación les arrebató las ventas.

“El año pasado estuvo más crítico que este año, este año la gente sí lleva pescado, sobre todo que la mayoría de la gente, últimamente utiliza más el cubre bocas y todo eso”, agregó.

Por su parte, David Rodríguez, quien se encuentra al interior del mercado, dijo que los primeros días se vende más el filete, pero después, unas semanas más adelante es la mojarra, por lo que ya está prevenido.

“Se ha mantenido el precio de lo que es el filete, la mojarra subió un poco, el huachinango es el que está un poco carito, bueno siempre ha sido caro , pero ahorita sí está arriba de $180.00 el kilo”, dijo.

Los comerciantes aseguraron que están llevando a cabo todas las medidas de sanidad para que la gente pueda acercarse a comprar con confianza.

El personal de los establecimientos tienen puesto su cubrebocas, reparten a los clientes gel antibacterial y además forman a las personas de una manera que se lleve a cabo la sana distancia.