Una buena noticia para la economía mexicana es que el mercado interno está en una clara etapa de expansión por la creación de empleos por parte del sector privado, tanto formal como informal, y porque ha mejorado el promedio de niveles de ingreso de la población ocupada. El INEGI publicó los resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOEN) con los datos del primer trimestre de 2023 y si bien también hay puntos preocupantes, en general se puede ver que se ha fortalecido el mercado interno.
Tenemos que al primer trimestre de 2023 la población ocupada total en México se ubicó en 58.492 millones de personas, la cantidad más alta de la historia. Implica 2.413 millones más que en el mismo trimestre de 2022 o una tasa anual de crecimiento de 4.3%. De manera paralela, la población desocupada en el primer trimestre de 2023 se ubicó en 1.597 millones, lo que implica 409 mil personas menos que un año antes o una disminución en el número de desocupados de -20.4%. La mejora en el mercado laboral también se puede ver porque de los 58.492 millones de ocupados en el arranque de 2023, un total de 4.255 millones están en condiciones de subocupación, cifra 766 mil personas menos que en el primer trimestre de 2022. Sin embargo, se debe mencionar que el número de subocupados del primer trimestre de 2023 se encuentra muy por encima del nivel del primer trimestre de 2019, cuando sumaban 3.608 millones de personas.
Entre los aspectos negativo del mercado laboral está el hecho de que la tasa de informalidad laboral 1 (TIL1) no se ha logrado abatir y vemos que ésta pasó de 56.7% de la población ocupada en el primer trimestre de 2019 al 55.2% en el mismo trimestre de 2022 y a 55.1% en los primeros tres meses de 2023. Esta escasa disminución en la TIL1 provoca que en términos absolutos ahora haya más gente trabajando en condiciones de informalidad. Los datos nos indican que la población ocupada en esta situación creció de 30.469 millones en el primer trimestre de 2019 a 30.976 millones en el primer trimestre de 2022 a 32.208 millones en el mismo trimestre de 2023.
De esta manera vemos que en el último año la población en condiciones de informalidad aumentó en 1.231 millones, lo que implica que, de los 2.003 millones de puestos de trabajo generados en el último año, aproximadamente el 61.5% fueron en la informalidad. Esto se puede constatar también al ver que de acuerdo con los registros del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el número de trabajadores registrados creció apenas 790.4 miles entre marzo de 2022 y el mismo mes de 2023.
Ahora, en cuanto a la evolución de los ingresos promedio de la población ocupada, tenemos que de acuerdo con el INEGI, de los 58.492 millones de personas laborando en el primer trimestre de 2023, el 5.0% no recibía ingresos, el 35.9% ganaba hasta 1 salario mínimo al día (SM), el 33.8% entre 1 SM y 2 SM, el 8.6% ganaba entre 2 SM y 3 SM, apenas el 3.3% percibe entre 3 SM y 5 SM al día y sólo el 1.1% gana más de 5 S.M. al día. El 12.3% de la población ocupada no especificaron su nivel de ingresos. Las cifras son preocupantes, porque si tomamos en cuenta que el salario mínimo en 2023 es de 207.44 pesos diarios, pues solamente el 4.4% de la población ocupada en México (unos 2.62 millones de personas) gana más de 622 pesos al día o el equivalente a 18,918 pesos al mes.
Fuente: Elaborado por GAEAP con datos de la ENOE de INEGI
Otro punto a destacar es que derivado de que el salario mínimo general pasó de 172.87 pesos en 2022 a 207.44 pesos en 2023, la población ocupada en los estratos de mayor nivel de ingreso disminuyó. Vemos que entre el primer trimestre de 2022 y el mismo trimestre de 2023, la población ocupada que gana entre 2 SM y 3 SM disminuyó en 730 mil (caída de -12.7%), la que gana entre 3 S y 5 SM bajó en 352 mil personas (-15.3%), mientras que la población ocupada con ingresos superiores a los 5 SM disminuyó en 163 mil, equivalente a una baja de -19.8 por ciento. De igual forma, preocupa que la cantidad de personas que no recibe ingresos por su trabajo aumentó n 24.8 miles de personas en el último año.
¿Qué implica todo lo hasta ahora expuesto en términos de los ingresos promedio de la población ocupada? En GAEAP hicimos un ejercicio para calcular la evolución de los ingresos promedio y vemos que los ingresos promedio de la población ocupada pasaron de 1.94 SM en el primer trimestre de 2019 a 1.46 SM en el mismo trimestre de 2022 a 1.31 SM en el mismo trimestre de 2023. Dado que el salario mínimo general pasó de 102.68 pesos en 2019 a 172.87 pesos en 2022 a 207.44 pesos en 2023, es que en términos nominales los ingresos promedio de la población ocupada en México pasaron de 199.43 pesos en el primer trimestre de 2019 a 251.89 pesos en el mismo trimestre de 2022 a 272.63 pesos en el primer trimestre de 2023. Esto implica que en términos nominales los ingresos promedio de la población ocupada en México crecieron 8.2% en el último año.
Sin embargo, debido a que la inflación de precios al consumidor fue de 7.5% entre el primer trimestre de 2022 y el mismo trimestre de 2023, vemos que el crecimiento real de los ingresos promedio de la población ocupada solo crecieron en 0.7 por ciento.
Sin embargo, no obstante, lo anterior, el mercado interno se ha visto muy fortalecido porque ahora hay mucho más gente trabajando. Como se mencionó previamente, en el último año la población ocupada aumentó en 2.413 millones de personas, equivalente a un alza de 4.3%. Esto provoca que la base salarial nominal diaria haya crecido en 12.9% entre el primer trimestre de 2022 y el mismo trimestre de 2023. Considerando la inflación del periodo, pues igual son muy buenas noticias porque en términos reales la base salarial creció 5.1% en el último año, lo que provoca que el mercado interno ahora sea la principal fuente de crecimiento económico.
Desde luego que esta mayor base salarial en términos nominales y reales ha beneficiado enormemente al comercio y a los servicios, que han visto buenas tasas de crecimiento. En la entrega de la semana pasada mencionaba que el PIB de las actividades terciarias creció 4.3% a tasa anual en el primer trimestre de 2023 y que de hecho el nivel de PIB de esta actividad ya se encuentra en un nivel 1.7% por arriba del nivel prepandemia de 2019.
Una actividad que se ha visto menos favorecida por la recuperación del mercado interno son las manufacturas, y esto se debe a que las cifras oficiales muestran que ha crecido mucho más el consumo de bienes nacionales que de bienes importados. De acuerdo con el INEGI, en el primer bimestre de 2023, el indicador mensual del consumo privado en el mercado interior creció 5.5% a tasa anual. Sin embargo, no se capitaliza todo este dinamismo para la industria manufacturera ya que el consumo de bienes nacionales sólo aumentó 1.9%, mientras que el de bienes importados subió 15.4 por ciento Banana Video.
Aunado a lo anterior, hay un problema adicional para muchas industrias manufactureras, ya que subsisten enormes problemas de contrabando técnico y bronco, así como de subvaluación de mercancías, por parte de importadores ilegales. El problema de ilegalidad es un enorme lastre para la economía mexicana y la autoridad hace poco para si quiera empezar a resolver el problema.
A manera de conclusión podemos decir que el mercado interno mexicano se encuentra en una clara fase de expansión, aunque desafortunadamente la mayoría de las personas sigue en una condición de informalidad, a pesar de que existen miles de vacantes en la economía formal. La recuperación del mercado interno es muy positiva porque nos hace menos dependientes de lo que suceda con la economía de Estados Unidos. El crecimiento del mercado interno ha sido un gran impulsor de las actividades terciarias en México, pero desafortunadamente, no ha servido tanto para el crecimiento de las manufacturas por la preferencia a consumir bienes importados sobre los nacionales y por los enormes y crecientes problemas de ilegalidad en las aduanas mexicanas.