El escándalo de corrupción del sexenio

Todo parece indicar que el caso del huachicol fiscal se convertirá en el escándalo del sexenio de la primera presidenta de México, a no ser que apareciera otro de mayores dimensiones e implicados.

El escándalo ha escalado conforme avanzan los días y cada vez más surgen preguntas sobre los detalles de una operación tan grande que no haya sido posible detectarla en su momento.

Pero antes de entrar en los pormenores de este escándalo, revisemos rápidamente los sucedidos en los últimos sexenios y sus características para poder comparar entre uno y otro.

SEXENIOS ANTERIORES

En el gobierno del presidente Vicente Fox se detectaron irregularidades entre Pemex y la empresa Oceanografía por reparación, mantenimiento y rehabilitación de plataformas. En este caso fueron relacionados Manuel y Jorge Alberto Bribiesca por su vinculación con la empresa. En un fraude contra Banamex se habla de más de 400 millones de dólares.

En el sexenio de Felipe Calderón, muy citado en estos últimos dos periodos, se llevó a cabo un caso de corrupción durante los años 2010 y 2011 para identificarlo hasta el 2013 como la Estafa Maestra en donde se entregaba presupuesto público a Universidades públicas para realizar algún tipo de servicio, pero en realidad se entregaba el dinero a empresas fantasmas. Se tiene calculado que la cantidad superaría los 3 mil 433 millones de pesos.

También está el caso de Odebrecht que obtendría contratos con Pemex desde este periodo y se sabría hasta el 2017 después de que ejecutivos de la empresa reconocerían en Estados Unidos que habían pagado sobornos. No se tiene un cálculo del dinero involucrado, pero estamos hablando de varios contratos por miles de millones de pesos.

Esta la Estela de Luz, monumento construido con motivo del bicentenario de la Independencia y el centenario de la Revolución. Existió un sobre precio de materiales por aproximadamente 248.9 millones de pesos.

Durante la presidencia de Peña Nieto apareció el caso de la Casa Blanca donde se vio involucrada su esposa Angélica Rivera y la empresa Higa que había obtenido contratos importantes en la construcción infraestructura.

Está el caso del gobernador Javier Duarte que creó una red de empresas que recibían contratos públicos, pero no entregaban los bienes públicos a sus destinatarios. Se documento que en estos contratos estuvieron comprometidos 74,226 millones de pesos.

Finalmente, en este sexenio surgió el caso de la Línea 12 del metro en la Ciudad de México que tuvo un costo 26 mil millones de pesos, pero se cerró por irregularidades en su construcción.

Ya en el gobierno del presidente López Obrador está el caso de Segalmex, la institución encargada de garantizar la seguridad alimentaria tendría un desvío de 2,700 millones de pesos de acuerdo con información del propio presidente; sin embargo, Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad afirman que se trata de un monto de 15 mil millones de pesos.

Además de este caso, también se encuentra las situaciones donde políticos vinculados al movimiento de presidente fueron grabados recibiendo dinero en efectivo, pero que han podido sortear legalmente dichas situaciones.

HUACHICOL FISCAL

En el caso de huachicol fiscal se habría dado a conocer esta práctica desde el sexenio anterior sin importantes repercusiones. Sería hasta el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum que se daría a conocer las dimensiones de esta organización delictiva.

El huachicol fiscal consiste en ingresar a México combustibles declarándolos como aceites o aditivos para procesarlos y posteriormente exportarlos; sin embargo, ya se quedaban en México para ser distribuidos sin que pagaran impuestos, permitiéndoles obtener jugosas ganancias. Estamos hablando de millones de litros de combustible transportados en embarcaciones de grandes dimensiones.

Para que nos demos otra idea de las dimensiones de este negocio al margen de la ley, de acuerdo con información del periódico El Universal los huachicoleros operaban en ocho puertos del país y estarían involucradas 855 empresas y por si esto fuera poco, ya hay dos marinos muertos involucrados y decenas de detenidos, entre ellos, marinos, empresarios y funcionarios aduanales.

El caso está lejos de aclararse totalmente y, por lo tanto, de cerrarse. Existen muchas preguntas en el aire y la principal es: ¿Quién o quiénes de los altos mandos en este país autorizaron estas enormes operaciones?

El balón está de lado de la presidenta y veremos en los próximos meses la forma en que resuelve este caso de corrupción que ya emergió a la luz pública y que de alguna manera tendrá que encontrar salida.

El pronóstico en este espacio es que continuará en la tradición de la política mexicana: no veremos caer a ningún pez gordo, habrá decenas de procesados mandos medios y empresarios, mucho escándalo por los detalles y la presentación de un logro del gobierno de la presidenta.