Estamos tan ocupados en los temas de la seguridad, la economía y la salud que no nos damos cuenta que han estado jugando con nosotros, en uno de los temas más torales para la subsistencia de los leoneses como lo es la falta del vital líquido, que conocemos como el agua potable.
Es de todos conocido, al estarlo sufriendo los leoneses, que en muchas de las colonias existe falta de suministro y voy a recordar un dato.
En Abril del 2019, SAPAL informó que 68 colonias se podrían ver afectadas en razón de trabajos de mantenimiento y mencionaré algunas al azar, San Juan de Dios, Independencia, San Sebastián, Rancho el Guaje, Santa Rita, La Piscina, San Agustín, San Ignacio, Paseos del Maurel, Los Reyes, El Retiro, Fracc. Hidalgo, Coecillo, La Candelaria, Los Limones, Las Mandarinas, etc.
El problema es que no se informó cuando se restablecería y hasta hoy, continua habiendo agua, sólo en ciertos horarios y sólo aquéllos que tienen aljibe pueden recolectar agua. El problema no queda ahí, la cuestión es que la falta de agua, conlleva a problemas de salud, por un inadecuado lavado de trastes, de ropa y de higiene personal y las consecuentes gastroenteritis, enfermedades de la piel, epidemias de piojos, etc., sobre todo en las áreas rurales.
Al parecer se quiere descubrir el hilo negro cuando apenas están pensando, los directivos de SAPAL, en la construcción de bordos para que no se pierda el agua que cae, proveniente de la lluvia y estén planteando como solución, el uso de pozos con los que cuenta la institución que controla el abastecimiento de agua, que según esto son 157 y una gran explicación, de un plan B para resolver el uso del agua, que no es convincente, por lo que hay que analizar los antecedentes.
En uno de los medios de comunicación más prestigiados de la ciudad, aparece una nota informativa en la que se da a conocer una fuente cercana al gobierno municipal que para recuperar la concesión de la obra de la Presa de Zapotillo se iba a otorgar una indemnización de mil millones de pesos, esto en razón de que la empresa española Abengoa, pretendía demandar a los gobiernos local, estatal y federal, por la cantidad de 2 mil millones de pesos, por lo que en su oportunidad en el 2018, el ex_gobernador Miguel Márquez informó que había solicitado a la Conagua que El Zapotillo, se convirtiera en una obra pública en razón de que era conveniente negociar dicha indemnización y fuera absorbida finalmente, a través del Fondín que es el apoyo que, a fondo perdido podía otorgar al proyecto, garantizando agua para León en los próximos 25 años.
Esta situación que no se ha hecho pública y el de la voz no puede puntualizar a ciencia cierta, si se pagaron dichos millones a esta empresa española, lo cierto es que ésta actualmente se encuentra en quiebra, según la información que ha fluido en los medios. Ahora bien se está discutiendo la viabilidad de la construcción de la presa del zapotillo, pero aparte del costo millonario, tiene que inundar y por ende desaparecer a 3 pueblos o comunidades, Temacapulín, Acasico y Palmarejo y consecuentemente se sigue jugando con la necesidad de este vital líquido.
Conclusión: se construya o no se construya la presa, lo temeraria es que los políticos en turno han jugado con la necesidad de la subsistencia de la familia de los leoneses, porque con la vida y los elementos como lo es el agua, que es un derecho humano, no están al arbitrio de las promesas de los políticos que nos han engañado prometiéndonos una obra de esta envergadura, cuando no se contaba con el presupuesto y además que se fue omiso al momento de realizar los contratos, de asegurar el feliz término de esta obra a través de fianzas efectivas, para en caso de incumplimiento, poder demandar a quien no pudiera cumplir con sus obligaciones y deberes, no hay que olvidar que esta empresa española, realizó una obra muy similar en Cochabamba, Bolivia y de la noche a la mañana, la tarifa del agua se incrementó en un 300% por lo que los bolivianos, salieron a la calle y evitaron esta injusticia esperemos que no se repita la historia en nuestra ciudad.