En los últimos días se ha reportado que, a partir de este año el Servicio de Administración Tributaria (SAT) cobrará un impuesto a aquellos depósitos que se realicen en efectivo y que sean por 15 mil pesos o más; sin embargo, esta información es falsa, pero lo que sí es cierto es que el fisco vigila estos depósitos.
Si tus depósitos en efectivo superan la cantidad de 15 mil pesos, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) podrá tomar cartas en el asunto, esto debido a que se deben declarar, de acuerdo con la Resolución Miscelánea Fiscal para 2021: Regla 3.5.13.
El SAT detalla que las Instituciones del Sistema Financiero deberán declarar los depósitos en efectivo que se realicen en las cuentas abiertas a nombre de los contribuyentes en las instituciones, toda vez que el monto mensual acumulado exceda de los 15 mil pesos mexicanos.
En ese mismo sentido, también aplicará respecto de todas las adquisiciones en efectivo de cheques de caja.
El Impuesto a los Depósitos en Efectivo (IDE) entró en vigor en el 2008 y gravaba con 3% aquellos montos que se depositaban en efectivo a partir de 15,000 pesos.
Este impuesto, añadió, servía de cierta manera para que la autoridad fiscal combatiera la alta informalidad que existe en el país pero, en la reforma fiscal del 2014, el IDE fue eliminado y en su lugar el SAT implementó otros métodos de fiscalización.
Hoy se debe presentar un informe a más tardar el día 10 del mes de calendario inmediato siguiente al que corresponda. Asimismo, esto obedece al objetivo de cumplir con la obligación establecida en la Ley del Impuesto sobre la Renta.
Esto no significa que con el aviso ya estamos relevados de cualquier obligación tributaria, sino que esto le sirve a la autoridad a detectar evasiones fiscales en pagos en efectivo, ya que este informe se contrasta con la declaración mensual del contribuyente y la diferencia será un saldo a pagarle al SAT, en otras palabras, sino recibes depósitos en efectivo por un millón de pesos mensuales, pueden suceder dos cosas: 1) Que no lo declares, tendrás un doble problema por una presunta evasión fiscal y eso te lo revisará el SAT, y la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) se encargará de verificar que el dinero recibido no provenga del actividades tipificadas como lavado de dinero.
Si pagas el impuesto relativo a los depósitos en efectivo, no tendrás problemas con el SAT, pero si con la UIF, pues la presunción del delito de lavado de dinero proseguirá tu andar empresarial.
En los tiempos de los abuelos podías poner el dinero a nombre de la abuela, y con solo decir que era ama de casa no sucedía absolutamente nada, hoy en estos tiempos si pones esos depósitos en una cuenta a nombre de la abuela, estarás metiéndola en un problema bastante serio.
Así que debemos de tener cuidado con el SAT, más si perteneces a la clase media.
Por eso es importante este tema debemos estar estar atentos no solo a los depósitos en efectivo, sino a todo lo que implica el pago de contribuciones, para tal efecto les sugiero hacerse de los servicios de un buen contador, hay muchos y con mucha experiencia profesional, pero si estás pensando en un contador de doscientos pesos mensuales, piénsalo dos veces, pues un mal servicio te sale más caro que uno bueno y de honorarios justos.