Tal vez este proceso podríamos definirlo como un catálogo de todo lo que está mal en la teoría política y en el deber ser jurídico.
Empezó con una sobrerrepresentación en donde a través de fórmulas raras, el partido del poder tuvo más porcentaje de diputados que el porcentaje de votos que obtuvieron, continuó con que para conseguir los votos de los senadores compraron un par del PRD, extorsionaron uno de Movimiento Ciudadano y se aliaron con lo más terrible del PAN.
La reforma estaba técnicamente mal hecha, llena de errores de técnica legislativa, en el salón de clases con mis alumnos estuvimos haciendo un estudio en donde encontramos las fallas de aplicación, de funcionamiento, errores de fondo y forma.
Los procesos de selección de candidatos venían mal diseñados desde el texto de la reforma y en la práctica fue todavía peor de lo que se esperaba, era imposible hacer una revisión debida de los perfiles que se postulaban, se brincaban suspensiones de amparos y al final fue una mezcla de todo lo que quedó en las boletas.
Una sabia tómbola decidía todo, como si a los mexicanos se nos hubiera acabado la inteligencia, la tómbola dijo quiénes eran los juzgadores que se iban, y luego seleccionó candidatos y luego dijo a donde serían asignados, renunciamos a los análisis, renunciamos a la justicia, renunciamos a pensar, se decidió que tombolear era la manera más inteligente que teníamos para hacer lo mejor. Cuando piensas que el azar piensa mejor que tú es porque realmente piensas poco.
Y finalmente la voluntad del pueblo fue seguir acordeones, no se empoderó a ningún ciudadano, se hizo una farsa de trampa electoral que no es democrática, por el contrario hiere de muerte a la democracia mexicana.
Votaron el 13% del padrón y de esos realmente solo el 10% eran votos, los demás eran nulos o mentadas de madre. Uno de cada 10 mexicanos participó, y de esos la mayoría obedecía ordenes de un acordeón supremo. No se empodera un ciudadano cuando se le hace obediente de un acordeón que no entiende.
Como sea hasta ahora pensábamos que el INE era confiable, pero ahora con casillas donde hubo más votos de los posibles, donde aparecieron boletas prellenadas, donde el INE contemplaba la trampa del voto dirigido con acordeones y se callaba, comprando la explicación de la creatividad mexicana.
En México la justicia está herida de muerte, esperemos que aquellos que quedaron y son de carrera judicial puedan levantar un poco el nivel de todos los demás juzgadores. En México la democracia está herida de muerte, esperemos que los Mexicanos no aceptemos nunca más la burla como supuesta democracia.
