En pro del valor supremo de la justicia, la reclasificación de un delito es una garantía considerada en nuestro Sistema de Justicia Penal Acusatorio, pero como en todo, su aplicación puede ser o no justa e incluso puede ser inmoral.
En los días recientes se dieron a conocer dos hechos jurídicos de reclasificación del tipo penal en favor de reos que resultaron beneficiados, como fueron los casos de un diputado electo panista, Jorge Romero Vázquez, y de Yoseline Hoffman, una youtuber mejor conocida como YosTop.
Los dos asuntos acapararon el interés nacional por las personas de que se trata, pero en el subconsciente público quedan dos sabores de boca. En el primero como de un hecho injusto para la víctima y en el segundo como una “justicia acordada” con la parte agraviada.
Al diputado electo (quieran o no) se le acusó de violación espuria hacia una joven ex reina de belleza, a quien presuntamente drogó previamente, según la narración que hizo ella ante medios locales y nacionales.
Finalmente, la reclasificación convirtió a un delito grave en uno menor como es el abuso deshonesto. La opinión pública local se fue contra el Juez, porque se creyó que este había sido parcial en su actuación.
Por eso mismo nuestro amigo Héctor Tinajero Muñoz, magistrado presidente del Poder Judicial, aclaró que el Juez no tiene la facultad de atender o no atender, aceptar o rechazar la reclasificación de la acusación, porque la ley sólo les permite darle el trámite, y nada más.
Se presupone una actuación apegada a derecho y justicia en nuestro sistema garantista, por parte del Ministerio Público, en este caso de la Fiscalía estatal. Es aberrante que pudiera responder a cuestiones políticas, como queda en la suspicacia colectiva.
En efecto, la clasificación jurídica consiste en que el fiscal expone el tipo penal que está manejando, su nivel de realización (tentativa o consumación), así como la presencia de atenuantes o agravantes.
Sobre el asunto de la influencer YosTop (que, según san Google, tiene 13 millones de seguidores), ella fue acusada de pornografía infantil por la presunta posesión y publicación de un video donde un grupo de jóvenes viola a la entonces menor de edad.
Mientras que Yoseline Hoffman fue vinculada a proceso, los violadores siguieron en libertad y ella la obtuvo luego de que la víctima aceptó la reclasificación penal, bajo la condicionante de que la acusada deberá sujetarse a un proceso de readaptación social.
En suma, nuestro sistema de impartición de justicia debe ser eso en esencia.
No se puede transfigurar, no puede haber una metamorfosis en favor de una víctima o un victimario. Su balanza se llama imparcialidad, por eso es la impartidora invidente.
No lo digo yo, pero estoy de convencido de este concepto: la justicia es un principio universal que rige la aplicación del derecho para conseguir que se actúe con la verdad, dando a cada uno lo que le corresponde.
