Agencias, a 13 de septiembre de 2022. – Cohete de Blue Origin sufre anomalía y acaba en llamas durante una misión no tripulada. No había pasajeros dentro de la cápsula, pero el mal funcionamiento ahora genera dudas sobre la seguridad de la oferta de turismo espacial de Jeff Bezos.
Un vuelo no tripulado del cohete suborbital New Shepard de Blue Origin terminó en una falla, poco después de su despegue el lunes 12 de septiembre desde Launch Site One (Sitio de Lanzamiento Uno) en el oeste de Texas, Estados Unidos. La cápsula, repleta de cargas científicas y tecnológicas, logró sobrevivir a un aparente mal funcionamiento del propulsor, y el sistema de escape de lanzamiento funcionó con éxito según lo diseñado.
La anomalía del propulsor ocurrió poco más de un minuto después del lanzamiento del cohete a las 10:27 a. m. (horario E.T.). La transmisión en vivo de Blue Origin mostró el cohete durante MaxQ, el momento de máxima tensión aerodinámica para un cohete, pero el vuelo se deterioró rápidamente después de eso, y el propulsor quedó envuelto en llamas. Luego, la cámara cambió a una vista de primer plano de la cápsula, que se expulsó del propulsor como resultado de la anomalía (supongo que esto fue un cambio automático de cámara, ya que Blue Origin probablemente no quiere que veamos cómo explotan sus cohetes propulsores en pleno vuelo).
Este incidente es la primera falla significativa para el New Shepard, un cohete confiable. Es probable que se lleve a cabo una investigación sobre la anomalía, y es probable que el New Shepard esté en tierra hasta que se sepa más sobre la causa del problema.
El sistema de escape de lanzamiento del cohete parecía funcionar a la perfección, pero los posibles turistas espaciales ahora podrían pensarlo dos veces antes de viajar a bordo de un cohete New Shepard. Al menos hasta que Blue Origin tenga un mejor control de lo que pasó hoy.