Apicultura guanajuatense alcanzó un valor de 38 MDP el año pasado

Guanajuato, Gto., 22 de octubre de 2024.- La apicultura en Guanajuato se fortalece año con año, en producción, apicultores y profesionalización, con el respaldo del Gobierno del Estado. Tan sólo entre 2023 y 2022, se produjeron 43 toneladas más de miel de abeja.

La Secretaría del Campo informó que el crecimiento en la producción es constante anualmente y se ha mantenido en ascenso desde el año 2019.

Como ejemplo, en 2023 se produjeron 735 toneladas de miel de abeja, con un valor de la producción de $38 millones 189 mil 888 pesos; mientras que en el 2022 se produjeron 692 toneladas de miel, con un valor de la producción de $35 mil 790 528 pesos, de acuerdo al Sistema de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP).

Los municipios más productores son León, con 171 toneladas; San Francisco del Rincón y Apaseo el Alto con 61 toneladas cada uno; Celaya y Comonfort con 50 toneladas cada uno.

La apicultura de Guanajuato está conformada por aproximadamente 36 mil 869 colmenas en mil 228 apiarios, y representada por 409 apicultores, por lo cual es un subsector de la ganadería que genera una importante cantidad de empleos y derrama económica para el estado.

Para impulsarla, este Gobierno de la Gente brinda apoyo en tres aspectos distintos. El primero, mediante proyectos productivos, con entrega de abejas reina; núcleos de abejas; cámaras de cría; charolas salvamiel; descristalizadoras; extractores eléctricos; bancos desoperculadores, así como fructosa.

También se brindan apoyos en Capacitación y Asistencia Técnica, a través de cuatro grupos con 80 integrantes cada uno, en temas de manejo, sanidad, nutrición, genética, reproducción, transformación, valor agregado, entre otros.

Y se apoya en materia de sanidad animal, a través del tratamiento contra la varroasis; la campaña contra el pequeño escarabajo de la colmena y mediante capacitación y difusión para la prevención del colapso de las abejas.

A la par del crecimiento de la producción, se prevé que las y los apicultores sean pieza clave en el cuidado y protección de las abejas y, por tanto, en el equilibrio de los ecosistemas.