Carl Weathers, el actor estadunidense quien interpretó al boxeador Apollo Creed en la saga Rocky junto a Sylvester Stallone en uno de los filmes de boxeo más recordados y emotivos, murió a los 76 años, informó ayer su familia.
Weathers, quien también actuó en la película Depredador (1987) junto a Arnold Schwarzenegger, tuvo recientemente un papel en la serie The Mandalorian, por la cual estuvo nominado al Emmy.
Estamos profundamente entristecidos de anunciar la muerte de Carl Weathers”, dijo su familia, de acuerdo con el medio Deadline.
Carl fue un excepcional ser humano que vivió una vida extraordinaria. Por medio de sus contribuciones al cine, a la televisión, las artes y los deportes dejó una marca indeleble y es reconocido en todo el mundo y por generaciones.” El comunicado no detalló las causas de la muerte, pero agregó que murió pacíficamente mientras dormía el jueves.
La carrera de Weathers se extendió por cinco décadas e incluyó más de 75 apariciones en películas y televisión, empezando con los llamados filmes Blaxploitation a mediados de los años 70, que presentaban afroamericanos en roles que rompían los estereotipos.
El público más joven disfrutó con su papel en el éxito de Disney The Mandalorian, serie derivada de Star Wars, en la que interpreta a Greef Karga, el jefe del gremio de los cazarrecompensas, que se acerca al protagónico Pedro Pascal a lo largo de nueve episodios.
Weathers también hizo la actuación vocal de Combat Carl, en la cuarta entrega de la franquicia Toy Story, en 2019.
También recibió aplausos por su papel como instructor de golf en Happy Gilmore, donde entrena a un pupilo (Adam Sandler), luego de que se retira de un torneo profesional tras perder su mano por un caimán.
Es muy divertido estar siempre cerca. Inteligente hasta el final. Leal y divertido hasta el final”, dijo Sandler sobre Weathers en Instagram.
Pero fue con el papel de un patriotero campeón peso pesado de boxeo, Apollo Creed, que al interponerse en el camino del rudo retador Rocky Balboa, logró quedarse en la memoria del público.
La cinta Rocky, de 1976, de la que se produjeron otras tres películas (y retomada por medio de su saga derivada Creed) mostró al mundo un crudo retrato y una mirada brutal al mundo de los campeonatos mundiales de boxeo.
La película, que explota el arquetipo de un marginado contra las dificultades, combinó de forma excepcional la violencia cinemática para crear un instante clásico que todavía resuena casi medio siglo después.
La escena culminante, donde hay sangre, huesos rotos y golpes en cámara lenta, impuso un estándar para las películas de lucha y combates.
Con este filme, el mismo Stallone, se hizo camino al megaestrellato.
En Rocky II (1979), Weathers retomó su papel de Apollo Creed, al enfrentar a Balboa en un segundo combate.
Estuvo una vez más en Rocky III (1982), y en la cuarta entrega de la saga Rocky IV (1985), en la que muere en el ring contra un boxeador ruso, encarnado por Dolph
Lundgren.
Siguiendo el modelo de Muhammad Ali, el personaje de Creed demostró inteligencia y estilo, ofreciendo al público un personaje negro fuerte y positivo en un momento en que los papeles cinematográficos convencionales apenas comenzaban a romper con los estereotipos.
En una entrevista de 2016 con el Daily Beast, Weathers dijo que “le robó mucho” a Ali al crear el personaje.
Con cualquier papel que sea tan icónico, definitorio, grandioso, hay tantas cosas, ¿sabes? Pero sí, te pone en el mapa y hace tu carrera, por así decirlo. Pero eso es algo único, así que tienes que seguir con algo. Afortunadamente, esas películas siguieron apareciendo”, dijo Weathers.
El actor de Depredador y exgobernador de Minnesota, Jesse Ventura, dijo que el mundo ha perdido a “un icono”.
Carl Weathers era un talento fenomenal, un verdadero profesional y un querido amigo”, escribió en la red social X.
Casado y divorciado tres veces, a Weathers le sobreviven dos hijos, Jason y Matthew. El comunicado de su mánager describió a Weathers como un “querido hermano, padre, abuelo, socio y amigo”.
“Perdimos a una leyenda. Mi vida cambió para siempre el día que conocí a Carl Weathers. Es un día increíblemente triste para mí. Estoy tan destrozado que ni siquiera puedo decirlo. Carl Weathers fue una parte integral de mi vida, de mi éxito, de todo lo relacionado con él… cuando entró en esa habitación y lo vi por primera vez vi la grandeza, pero no me di cuenta de cuán grande era. Nunca podría haber logrado lo que hicimos con Rocky sin él. Es brillante… su voz, su tamaño, su poder, su habilidad atlética… pero lo más importante es su corazón y su alma. Es una pérdida horrible… Él era mágico y tuve mucha suerte de ser parte de su vida… Apolo, sigue golpeando.”
Sylvester Stallone, actor.
