Cuando analizamos el modelo de seguridad ideal, la investigación y castigo de los delitos es parte importante del mismo pues incide directamente en la confianza de la ciudadanía, al mostrar que la impunidad con la que muchas veces se conducen los delincuentes puede ser frenada por las autoridades, a la par de motivar a el resto de los cuerpos de seguridad al mostrar que su trabajo se traduce en la detención de los delincuentes.
Nuestra Fiscalía General de Justicia del Estado de Guanajuato presento la semana pasada el 2do. Informe de labores bajo esta nueva figura legal, mostrando diferentes avances en su consolidación estructural, pero un servidor se concentrara en el como su diario quehacer se refleja en los indicadores en materia de seguridad.
En su primer informe, con datos del 2019, señalaron haber iniciado 164,503 carpetas de investigación, ahora, reportan que durante 2020 119,810, lo que representa una disminución del 27.2%, este numero por si solo nos señalaría que podría hablarse de una mejora en materia de seguridad, pero es necesario confrontarlo contra otros datos, como la cifra negra, la cual de acuerdo a la encuesta ENVIPE que hace el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, el cual en su edición 2020 señala que en Guanajuato se denuncia 1 de cada 10 delitos, que también significa una mejora, pues en la edición anterior, de 2019, se señalaba que se denuncia 0.54 delitos de cada 10.
Del total de 119,810 carpetas iniciadas en el 2020, el 10% se llevo al conocimiento de un juez, el resto aun continúa investigándose o ya fue determinado por el ministerio publico; durante el 2019 se llevaron 14,970 carpetas que representaron en su momento el 9%, este cambio del 1% se tradujo en 1,365 carpetas mas llevadas ante un juez, que resulta significativo ante la disminución del universo total de carpetas de 2019 a 2020 que ya explicamos, pues con un 27.2% menos de carpetas, se llevaron ante el juez en el 2020, 16,335 carpetas.
Es importante visualizar que llevarlas ante un juez, no equivale a sentencia condenatoria necesariamente, pues puede resolver varias cosas respecto a cada una, de ese universo que comentamos de 16,335, la cantidad de 1,416 se resolvieron aceptando la pena solicitada por el ministerio público en procedimiento abreviado (el acusado acepta la culpa), 6,523 carpetas fueron vinculadas a proceso por los jueces (e inician el proceso jurisdiccional, pudiendo ser en prisión o no), y solo 230 carpetas llegaron a juicio oral, donde a diferencia del 2019 que lograron “ganar” en el 72% de los asuntos, ahora lograron sentencias condenatorias en el 97% de los asuntos.
Un dato importante también es el tratamiento a los mecanismo alternos de solución de controversias, en el cual las partes, en delitos no graves, pueden llegar a un acuerdo que ponga solución a el conflicto, donde del universo de 119,810 carpetas de investigación de 2020, un total de 27,790 se derivaron a este mecanismo, logrando acuerdos en el 54% de los mismos (menos que en 2019, donde el 61% logro acuerdos), lo cual nos marca que solo el 12.52% de las carpetas iniciadas lograron resolverse por este medio.
Los números se prolongan y es necesario precisar, ¿vamos bien?, los números dicen que disminuyo la impunidad, que disminuyeron los delitos; la percepción, medida también por el INEGI, nos señala que la población sigue sintiéndose insegura, por lo que se debe continuar trabajando en la seguridad, y en la persecución e investigación de los delitos, tarea donde la Fiscalía General de Justicia del Estado tiene la dirección por mandato constitucional.
Es vital impulsar el uso de mecanismos alternos en la misma Fiscalía, pues la solución pacífica de las controversias ayuda a mejorar la percepción ciudadana y de acuerdo a las cifras observadas, sigue siendo muy poco usada, no necesitamos llegar al castigo siempre como muchas voces claman, en la media en que tengamos mas acuerdos que permitan restaurar a las partes, se contribuirá a la disminución de la impunidad; y hago énfasis en ello pues es público y notorio que la mayor inversión en seguridad se viene realizando para ”disuadir” y castigar, y el llenar las cárceles no evitara el dolor a los ciudadanos, ello pasará en la medida en que se eviten delitos, y que de llegar a presentarse, se tengan opciones para busca restaurar en lo posible la vida de todos.