Agencias.- A la relación entre Matias Almeyda y Chivas ya solo le faltan las firmas para consumar el divorcio , pero este proceso tiene destrozado al estratega argentino, quien hizo vivir momentos de gloria al club y a todos sus aficionados.
Fuentes cercanas al Pelado confirmaron a Mediotiempo que la invitación de la directiva a dejar el timón rojiblanco devastaron al técnico, quien estaba muy ilusionado con disputar el Apertura 2018 y el Mundial de Clubes en Emiratos Árabes Unidos, pero con un plantel si no reforzado, al menos no tan debilitado.
A Almeyda le pareció injusto el trato que le dio la directiva, mismo canal en el que se encuentra familia y el cuerpo técnico. De hecho Almeyda, que está en Argentina, ya le comunicó a sus asesores la situación con el Rebaño. El argentino está a la espera de arreglar su indemnización para dar por concluida la relación que terminó de mala forma y anticipada, luego de que la directiva le ofrece un año de sueldo, a pesar de que su contrato está firmado hasta el 2020.
Otro de los temas que hacen aún más doloroso el momento del Pelado es el personal, ya que desde que llegó a Guadalajara en 2015 lo hizo con su familia porque vislumbraba un proyecto a largo plazo. Prueba de esas raíces que echaron en tierras tapatías es que incluso su hija Sofia es novia del jugador de Chivas, Benjamín Galindo Jr.
La intención de Almeyda era vivir por mucho tiempo en la perla tapatía, razón por la que tiene propiedades a su nombre. Hasta el momento ningún miembro de la directiva de Chivas ha hecho declaraciones al respecto, ni tampoco el club se ha manifestado.
El equipo está citado para comenzar la pretemporada este lunes, luego de que la directiva adelantó seis días los trabajos, última rencilla del argentino con la directiva porque ni siquiera le avisaron del cambio de fechas.
