León, Gto.- “El Gato Negro” es una cantina que ha dejado historia en León, está situada en la calle Reforma del Centro de la ciudad casi esquina con Justo Sierra y tiene más de 85 años de existencia, es una de las más viejas de León.
El negocio ha permanecido a la familia Rivas al menos durante los últimos 80 años, cuando el papá de don Francisco, don Benjamín Rivas, adquirió el lugar con todo y permiso.
En ese entonces la cantina se encontraba en la parte de enfrente de la calle y ya gozaba de grandes personalidades de la farándula, de la política y hasta del gremio torero, pues la Plaza de Toros estaba a una cuadra del lugar.
“Venían muchos artistas, muchos toreros, mucha gente importante, no, nomás de aquí de León sino de la República Mexicana y parte del extranjero, tenemos clientela de Chicago, Los Ángeles, en la Unión Americana”, platicó don Franscisco.
“Cantinflas”, “El Resortes”, Pedro Infante y José Alfredo Jiménez -uno de los compositores más importantes de México- llegaron a brindar con don Benjamín.
“Era una cantina de pueblo, popular, no era de mucha categoría que vinieran puras personas trajeados, no, la clase media siempre nos ha favorecido con su presencia aquí en el bar”, agregó.
Sin embargo, también recuerda la vez que un perro dio la vida por su papá, pues el hombre se metió a separar un pleito y uno de los agresores sacó la pistola y le disparó, pero la mascota se metió a defender a su amo y murió.
De historias como estas está llena el “Gato Negro”, donde en la actualidad siguen abriendo de lunes a domingo, de 10 de la mañana a 10 de la noche, y ofrecen buffet de botanas con sinfonola y karaoke.
